Dueños de talleres interponen 70 denuncias contra Semadet

GUADALAJARA, JALISCO (05/MAY/2014).- Por no renovar el trámite obligado para la continuidad de su licencia como punto oficial de verificación vehicular, 286 de los 797 giros en la Zona Metropolitana de Guadalajara han quedado afuera del esquema, mismo que la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial ( Semadet) busca modificar en el corto plazo.

Eso ha molestado a los dueños de 70 establecimientos, quienes ya han levantado denuncias contra la dependencia, aunque ninguna ha prosperado.

De hecho, sólo 35 de los procedimientos han sido interpuestos por los titulares de talleres que quedaron fuera de la verificación; el resto son de establecimientos que aún están dentro, y que de acuerdo con autoridades de primer nivel en la dependencia estatal, están alertas ante un procedimiento similar en su contra.

El problema inicia porque los 286 giros no renovaron su licencia dentro del plazo permitido (que venció el pasado 13 de febrero). Aunque administraciones anteriores de Semadet tenían permisividad y ofrecían una prórroga o facilidades posteriores, en la actualidad ésta ya no se cumplió.

Desde que se constituyó la Semadet, la dependencia ha dejado en claro su interés por abordar el tema de calidad del aire desde una óptica de salud pública, involucrando a las secretarías de Estado necesarias para que la gente tome conciencia del daño que hace respirar en un ambiente contaminado.

Por eso se ejerció más presión en el proceso de verificación, ya que más del 90% de contaminantes (como el Ozono) son provocados por el tráfico vehicular, y éste es agravado a su vez porque apenas el 30% de los tres millones de automóviles en el Estado circulan con un motor dentro de norma.

La titular de Medio Ambiente, Magdalena Ruiz Mejía, asegura que hubo al menos seis reuniones con los dueños de talleres o puntos de emisión de hologramas de verificación. Una de ellas con hasta 500 personas.

Detalla que "se merecían" una explicación, pero de ninguna manera permitió el diálogo para darles "una segunda oportunidad". Eso se los dejó en claro, porque "lo que toca es la aplicación de la Ley".

"No pueden alegar ignorancia y no pueden alegar, conmigo, que no fueron atendidos todo el tiempo para explicarles su situación. Jamás establecimos una mesa de negociación, pero sí de explicación: se la merecían, por supuesto. Pero tampoco los íbamos a engañar diciéndoles que iba a haber una segunda oportunidad, porque no es lo que toca. Lo que toca es la aplicación de la Ley; de un modelo que sí nos permita un alto nivel de eficiencia y eficacia".

Advierte que el fin último del actuar de la dependencia a su cargo es fincar los cimientos de lo que será un nuevo modelo "centralizado" de verificación, que esté diseñado por instancias de amplio conocimiento en el tema, y tomando como ejemplo el caso de la Ciudad de México, que pese a algunas fallas detectadas, logró reducir y colocar dentro de norma los niveles de contaminación del aire.

EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA