GUADALAJARA, JALISCO (20/FEB/2017).- A finales de febrero, el Gobierno del Estado y los municipios instalarán una mesa interinstitucional para establecer acciones de saneamiento de la Cuenca Río Santiago este 2017.A ocho años de que la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) emitiera la Macrorecomendación 1/2009, el Poder Ejecutivo ha registrado un cumplimiento de 46.51% en las 100 acciones requeridas. Está reprobado en el tema.Uno de los avances fue la elaboración del Programa de Manejo Integral de la Cuenca del Río Santiago-Guadalajara, que corrió a cargo de académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 2015, en la que se expone el diagnóstico del daño ambiental en la zona y se presentan nueve lineamientos con 28 estrategias.Por su parte, Rodolfo Montaño, director general de Planeación y Ordenamiento Territorial de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), reconoció que el tratamiento de aguas en las plantas del Ahogado y Agua Prieta han sido insuficientes, pero lo maneja como una responsabilidad meramente de los municipios.“Cada municipio tendría que tener su planta de tratamiento, que es otra de las competencias que tienen, les toca tratar sus aguas”, señaló.Según el funcionario, este año buscarán erradiar el lirio, una reforestación masiva y la instalación de una mesa interinstitucional para tratar los temas de agua, aire, salud, gobernanza y educación. Sin embargo, no son acciones que puedan sanear significativamente el río, ni que traten a profundidad el problema.En el estudio destaca la creación de una red de monitoreo que “permita detectar las violaciones en los aportes de las industrias a las corrientes, es algo imprescindible para mejorar la calidad de las aguas del Santiago”. Asimismo, se propone una estrategia de zonificación ambiental, para definir las Unidades de Gestión Ambiental en las regiones involucradas.ESTADO CRÍTICOAnálisis ambientalDe acuerdo con el análisis ambiental realizado por la UNAM, 82% de la superficie del Río Santiago se encuentra en las categorías de “inestable a inestable crítico”. En los estudios de monitoreo realizados, se constató que en 722 pruebas hubo “coliformes fecales”. Además se registró la presencia de nitrógeno amoniacal, que se presentó 320 veces arriba de lo normal.