Disciplina presupuestal, propósito de año nuevo del Congreso

GUADALAJARA, JALISCO (28/DIC/2010).- El Poder Legislativo de Jalisco entrará, a partir de enero próximo, en una disciplina presupuestal; para ello, implementará dos esquemas de trabajo: el primero consiste en aplicar un programa de retiro voluntario en el que pretenden que se sume por lo menos la mitad de los empleados actuales. La intención, dijo el titular de la Secretaría General del Congreso, Manuel Correa Ceseña, es que la plantilla quede al final de la Legislatura entre 700 y 800 trabajadores.

Actualmente, la nómina asciende a alrededor de mil 500 empleados; de éstos, de acuerdo con datos proporcionados por el secretario general del Congreso, 260 contaban con base hace más de un año, pero para enero de 2010, cuando concluyó la anterior Legislatura, había 517 basificados. El resto de los trabajadores labora bajo el esquema de honorarios.

Ante este panorama, el funcionario dijo que se debe trabajar en reducir la burocracia legislativa y comenzar a generar ahorros: “Lo que estamos haciendo es meter orden y lo primero que vamos a hacer es disminuir el número de gente que hay en el Congreso. Queremos  saber dónde y qué está haciendo la gente”.

Para poner en marcha el programa de retiro voluntario se requiere un presupuesto aproximado de 10 millones de pesos, con la finalidad de que sea atractivo para los empleados sumarse a esta figura legal laboral, pues tienen derecho de dos a seis meses de salario más el pago de algunas prestaciones.

En suma a esta medida, la Comisión de Administración del Congreso local ya analiza una propuesta del propio secretario para crear una contraloría interna con la finalidad de evitar posibles malos manejos administrativos.

“Estamos trabajando en la creación de una contraloría interna para evitar cualquier suspicacia, para que cuando se termine nuestra gestión nos podamos ir tranquilos. Debemos definir cómo le damos una estructura para que cumpla con su trabajo, porque no queremos auditorías a modo, esta figura debe cumplir con una función de supervisión”.

Confió en que la propuesta se apruebe y comience a funcionar el próximo año: “Queremos que a los diputados se les cuestione del trabajo legislativo que desempeñan, y no de los problemas administrativos que existen en el Congreso”.

En cuanto a la auditoría que la empresa privada Russell Bedford realizó a las finanzas de los años 2007, 2008, 2009 y 2010, Correa Ceseña dijo que ha estado analizando los resultados de la misma, pero reconoció que a la fecha no se han atendido las recomendaciones que ahí se exponen para evitar caer en los mismos vicios, como falta de comprobantes de compras. Expuso que la instrucción de acatar las recomendaciones de la auditoría debe provenir de la Junta de Coordinación Política.

El 2011 también será para renegociar deudas. El Congreso del Estado mantiene adeudos millonarios a dependencias como el Instituto de Pensiones, el Instituto Mexicano del Seguro Social ( IMSS) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Si el Congreso paga las deudas el próximo año, se quedaría con apenas 200 de los 500 millones de pesos presupuestados para ese poder. Por ello, ya se analiza renegociar la deuda con el Instituto de Pensiones para saldar cuentas con los otros proveedores.

FRASE

"Hubo tal crecimiento (de la nómina), que rebasó los órdenes administrativos y de manuales de desempeño y tabuladores; fue como un cáncer"

Manuel Correa Ceseña, secretario general del Congreso.