Martes, 26 de Noviembre 2024
Jalisco | Padres de familia acusan permisividad de las autoridades en autorización de licencias

Denuncian venta de alcohol cercana a centros escolares

Padres de familia acusan permisividad de las autoridades en autorización de licencias

Por: EL INFORMADOR

Fiesta. Jóvenes disfrutan de una tarde de bebidas en un bar contiguo a una universidad. EL INFORMADOR / E. Barrera

Fiesta. Jóvenes disfrutan de una tarde de bebidas en un bar contiguo a una universidad. EL INFORMADOR / E. Barrera

GUADALAJARA, JALISCO (06/OCT/2014).- Para Consuelo Mendoza, presidenta de la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF), “es grave que no se tomen las medidas ni se respeten los reglamentos para alejar los establecimientos de venta de alcohol de las escuelas”.

Asegura que su organización ha denunciado en diversas ocasiones, sin resultados, estos establecimientos, “que se hacen para que los visiten los menores”.

Silvia Lorena Cruz Martín del Campo, especialista en Neurobiología de las Adicciones, apunta: “El no cumplimiento de la legislación, que impide la venta de alcohol a jóvenes o los establecimientos de venta de alcohol cerca de escuelas, es un problema”.

En una investigación realizada por los Periódicos Asociados en Red (PAR) se logró detectar que en Guadalajara, Distrito Federal, Torreón, Durango, Tijuana, Mérida, Colima, Oaxaca, Villahermosa, Hermosillo y Veracruz hay establecimientos que están más cerca de las escuelas de lo que permiten las leyes y reglamentos, con casos incluso de venta de alcohol a menores.

La permisividad de las autoridades, la ambigüedad de las normas y la falta de capacidad u omisión de los ayuntamientos son los principales obstáculos para revertir este problema.

“Si uno no le da seguimiento a las leyes es complicado que puedan seguir con su cumplimiento”, dice la subdirectora de la Coordinación con Identidades Federativas de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) de la Secretaría de Salud, Tania Gordillo Moreno.

Algo que agrava la situación es la publicidad, que no está controlada y está enfocada a los jóvenes, mientras que rara vez hay campañas nacionales contra el alcohol.

Existe el mal ejemplo en la publicidad, considera Consuelo Mendoza, en donde se proyecta la imagen de “jóvenes exitosos” que consumen una bebida alcohólica. En este sentido, las instituciones compiten contra una industria cuyo objetivo final es vender, expresa por su parte Tania Gordillo Moreno, por lo que la mercadotecnia y la publicidad también son factores de riesgo.

El Artículo 33 del Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Publicidad otorga a la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC) de la Secretaría de Gobernación, la capacidad de sancionar a canales de televisión o estaciones de radio que transmitan publicidad de bebidas alcohólicas fuera de horario. Según la RTC, cuando la bebida que se anuncia excede los 20 grados de alcohol y se transmite en un horario de las 06:00 a las 21:59 horas, se actualiza esta infracción.

Tania Gordillo comenta que “hay un doble mensaje” por parte de la industria del alcohol ya que, por un lado, aparentan promover la prevención y el consumo responsable y, por el otro, patrocinan eventos deportivos o culturales que involucran a los jóvenes.

En cuanto a soluciones al problema, la presidenta de la UNPF considera a los alcoholímetros como un buen comienzo, pero “se necesitan campañas de prevención”.

Añade que, ante la reforma educativa, la Unión de Padres presentó a los legisladores sus propuestas y que, gracias a eso, en Ley General de Educación ahora existe la obligación de dar a los padres de familia apoyos como talleres y escuela para ejercer mejor su papel ante problemas como las adicciones.

Gordillo Moreno asegura que la Conadic lleva campañas de sensibilización con enfoques en la salud, la educación y la seguridad.

Dice que el alcohol no es visto como una droga, sino como una sustancia legal que sirve como lubricante social, por lo que no se percibe riesgo de generar dependencia.

Tampoco se sabe que la venta de alcohol a menores está tipificada en el Código Penal como corrupción de menores, por lo que se requiere más difusión al respecto.

FRASE

"
Es grave que no se tomen las medidas ni se respeten los reglamentos para alejar los expendios de venta de alcohol de las escuelas "

Consuelo Mendoza,
presidenta de la UNPF

GUÍA
La legislación vigente

— ¿Qué dice el reglamento?

— El Reglamento para el Funcionamiento de Giros Comerciales cataloga como “especiales” a todos los negocios relacionados con la venta y consumo de bebidas alcohólicas.

— ¿A quiénes involucra?

— Establecimientos como cabaret, centro nocturno, cantinas, cervecerías, discotecas, centros botaneros y bares deberán ubicarse a una distancia mayor de 150 metros de escuelas, hospicios, hospitales, centros de culto religioso, cuarteles, fábricas, locales sindicales, unidades deportivas y otros centros de reunión pública o privada.

— ¿Qué deben respetar?

— Colocar un letrero de forma visible al interior de su giro, advirtiendo la prohibición del consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, así como la venta a menores de edad.

— ¿Qué dice la ley?

— La Ley para Regular la Venta y el Consumo de Bebidas Alcohólicas del Estado señala apenas en su artículo segundo que: “Queda prohibido la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años de edad”.

— ¿Cuál es la excepción?

— La ley indica que un consejo dedicado a la administración de los giros, debe proponer al Ayuntamiento la designación de zonas turísticas o de tolerancia.

Y los establecimientos de bebidas alcohólicas que estén en un área turística determinada por el Ayuntamiento sí pueden ubicarse a una distancia menor a doscientos metros respecto de jardines de niños, planteles educativos o centros masivos.

Escuelas, entre antros y expendios

En una investigación realizada por los Periódicos Asociados en Red (PAR) se detectó que prácticamente en ninguna ciudad revisada se respeta la distancia mínima que establece la Ley General de Salud de 400 metros entre establecimiento de venta de alcohol y centros educativos.

Municipio o Establecimientos* / Centros Inspectores Distancia mínima ¿Se cumple la
Delegación Licencias** educativos*** permitida (metros) distancia siempre?


Cuauhtémoc 347 / ND 671 ND 200 NO

(delegación del DF)

Guadalajara 1,049 / ND 2,116 36 150 NO

Tijuana 388 / 3,679 1,755 160 150 NO

Mexicali 352 / 2,005 1,416 8 100 para lugares con alimentos SÍ (por exención)

y 150 para los de venta exclusiva de alcohol

Hermosillo 376 / 1,269 1,146 18 200 NO

Torreón 436 / 2,585 1,041 16 200 NO

Durango 218 / 1,175 1,236 ND 150 NO

Colima 141 / 1,332 319 ND ND ---

Oaxaca 344 / ND 495 ND ND ---

Mérida 1,065 1,337 12 200 expendios y 400 centros nocturnos NO

Villahermosa 474 / 1,200 1,041 ND 300 expendios y 500 centros nocturnos NO

(municipio de Centro)

Veracruz 322 / 1,101 755 8 250 NO

ND: No disponible

*Centros de venta de vinos, licores y cerveza y centros nocturnos, bares y cantinas.

Fuente: Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) del Inegi.

**Licencias o permisos para la venta de alcohol.

Fuente: autoridades locales.

***Escuelas públicas y privadas de nivel básico, CAM y otros centros de trabajo.

Fuente: Atlas Educativo del Inegi

(*) PAR está integrado por La Crónica, El Diario de Colima, El Diario de Yucatán, El Dictamen, El Financiero, Frontera, El Imparcial, El Presente, El Siglo de Durango,

El Siglo de Torreón, Noticias de Oaxaca y EL INFORMADOR.​

Mayor riesgo

Al menos cuatro de cada nueve jóvenes que consumen alcohol antes de los 18 años pueden desarrollar dependencia, asegura la especialista Silvia Lorena Cruz. De acuerdo con la investigadora del Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav). También uno de cada nueve individuos puede desarrollar dependencia al alcohol si comienza a consumirlo después de los 18 años. “Pero el riesgo es mucho más alto si se inicia su consumo antes de los 18, con cuatro de cada nueve jóvenes que desarrollan dependencia”.

El concepto de consumo moderado de alcohol en adolescentes no existe; “es igual que decir que una embarazada bebe con moderación”.

Advierte que los datos demuestran que los jóvenes beben más cuando son menores. Explica que la zona del cerebro que se desarrolla a los 21 años es la corteza prefrontal asociada con el control de las emociones y la toma de decisiones. “Si se interfiere el proceso con el alcohol, se desarrolla menos y más lentamente”. Por eso el no estar en contacto durante la adolescencia con sustancias psicoactivas permite la mejor maduración del sistema nervioso central y, por lo tanto, el mejor control de impulsos el resto de la vida.

Reacción tardía

Luis Berruecos, doctor en Antropología de la Universidad Autónoma Metropolitana, considera que la pobreza, el desempleo, la falta de integración familiar, la publicidad y la falta de políticas públicas, entre otras razones, provocan el consumo del alcohol entre adolescentes.

Parte del problema del alcoholismo es que es una enfermedad que tarda entre 10 y 12 años en aparecer, y por ello la gente no le pone mucha atención. “Se asumen alcohólicos cuando ya no funciona el hígado”.

El término alcoholismo suele ser malinterpretado, puesto que se usa para referirse a jóvenes que consumen la sustancia. Pero es hasta que se padecen enfermedades a causa del alcohol, 10 años después, cuando debe aplicarse el término.

Subraya la importancia de las campañas de prevención para combatir el problema. “Si la gente está informada de los efectos que produce el consumo del alcohol en ciertas cantidades, dejará de beber”.

Además se requiere personal capacitado necesario para atender alcoholismo, algo con lo que México no cuenta. De los tres mil psiquiatras en el país, sólo 30 son especialistas en alcoholismo, mientras existen nueve millones de alcohólicos.

PERIÓDICOS ASOCIADOS EN RED (PAR) *

INFORME. AYUNTAMIENTO TAPATÍO REVALIDÓ 271 PERMISOS DE 339 PETICIONES EN 2010
Aprueban ocho de cada 10 solicitudes para vender bebidas embriagantes


Las posibilidades de abrir una licorería o lugar de venta de cervezas en Guadalajara son amplias, por lo menos eso indica la cantidad de solicitudes aprobadas para instalar un negocio como éstos.

Desde las comisiones edilicias dicen que no se puede privar del permiso a un establecimiento que venda bebidas alcohólicas cuando cubre con todos los requisitos del reglamento, según la regidora tapatía, Verónica Flores Pérez, quien es presidenta de la Comisión de Gobernación, Reglamentos y Vigilancia. En su informe de actividades notifica que ocho de cada 10 solicitudes para abrir giros con venta de alcohol se aprueban.

De 339 peticiones de permiso recibidas por el Ayuntamiento desde 2010 a la fecha, 271 se validaron, sólo dos se han rechazado, 15 se regresaron porque no cumplían con algún requisito. Otras 38 están pendientes de resolverse.

Esto acerca el consumo a los menores de edad de acuerdo con el coordinador de Seguridad Universitaria de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Montalberti Serrano Cervantes, quien realiza revisiones conjuntas con inspectores de los gobiernos municipales para exponer la venta de bebidas alcohólicas a infantes. “Las autoridades otorgan de manera irresponsable licencias para que se coloquen esos giros en los alrededores de los planteles de preparatoria”.

La UdeG cuenta con 24 planteles de nivel medio superior en la Zona Metropolitana de Guadalajara, donde estudian 127 mil estudiantes. 95% tiene menos de 18 años de edad.

“El empresario del alcohol sabe que su potencial cliente son menores de edad, y quien otorga la licencia también lo sabe”.

Las revisiones resultan de un programa de detección de factores urbanos de riesgo, en donde también se inspeccionan instalaciones que puedan afectar a los estudiantes. “Nos contactamos con los directores de reglamentos y espacios abiertos y nos acompañan a hacer un diagnóstico conjunto”. Serrano Cervantes califica como “delincuencia autorizada” la instalación de negocios de venta de bebidas de licor o cervezas.

Ante la falta de inspecciones de los ayuntamientos, afirma, el problema seguirá: “El tema es qué va a hacer la autoridad. Siguen entregando licencias para que se abran más cantinas alrededor de las escuelas”.

Lamenta que la visita de parte de los adolescentes a estos lugares ya sea una cultura generalizada, por ello se pide el apoyo de las entidades de inspección de los ayuntamientos para hacer visitas periódicas a los negocios aledaños a los centros escolares en donde, sin excepción, se encuentran con comercios que venden alcohol a los estudiantes.

Describe que en las horas libres los alumnos salen y regresan alcoholizados a la siguiente clase. Estos eventos han ido en aumento provocando pleitos entre los mismos estudiantes.

La percepción del directivo concuerda con los resultados de la última Encuesta Nacional de Adicciones: la adolescencia es el periodo en que la mayoría de las personas comienzan a consumir alcohol y la cantidad de casos va en aumento; hasta 55 de cada 100 mexicanos iniciaron a consumir esta sustancia a los 17 años o menos, cuando en 2008 sólo eran 49 de cada 100.

EXIGEN PROHIBICIÓN
Aprovechan recovecos legales para abrir bares


Prohibir los giros de venta de alcohol, independientemente de baja o alta graduación, propone el coordinador de Seguridad de UdeG, Montalberti Serrano Cervantes, esto debido a que los empresarios y dueños de negocios encuentran “recovecos legaloides” para seguir instalando comercios de este tipo.

Explica que cuando se pide permiso para abrir tiendas o bares aseguran que se trata de bebidas con baja graduación de alcohol, o que venderán alimentos aunque sean sólo botanas, “con eso se cobijan”.

Casos similares ha encontrado la regidora tapatía Verónica Flores Pérez durante los operativos de revisión que hace cada mes junto con la Dirección de Inspección y Vigilancia, aunque no considera necesario reformar los reglamentos para inhibir el consumo de alcohol en menores de edad.

Explica que en los lugares cerca de escuelas que ya tienen derechos adquiridos de estadía “no se puede hacer nada para removerlos”, salvo que incurran en violaciones al reglamento y se les retire el permiso por violentar la ley.

“Puede ser un bar el cual se instaló en una zona determinada antes que una escuela y no puedes violar sus derechos, pero se les pide claramente que no les vendan a niños o adolescentes”.

Existen dos legislaciones que regulan la venta de bebidas alcohólicas, una es Ley para Regular la Venta y el Consumo de Bebidas Alcohólicas del Estado, y el reglamento municipal para el Funcionamiento de Giros Comerciales. De acuerdo con éstos es válida la venta de bebidas alcoholizadas en botellas cerradas, explica la regidora: “Reúnen todas las condiciones que establece el reglamento y no puedes privar eso porque la venden cerrada”.

La edil reconoce que los jóvenes y adolescentes se acercan a las tiendas de conveniencia a comprar y se quedan bebiendo a las afueras de las mismas. Denuncia como focos de atención al Centro Universitario de Artes, Arquitectura y Diseño de la UdeG y al de Ciencias Exactas e Ingenierías, donde también se ubican preparatorias como la 14 o la Escuela Vocacional.

Montalberti Serrano Cervantes agrega a la zona de Belenes, donde se ubican otros dos centros universitarios y preparatorias. Sobre el accionar de las autoridades, dice que ellos no pueden violentar sus propias leyes, además de que los limita porque sólo se pueden imponer multas cuando sorprenden a adolescentes bebiendo.

Para combatir el creciente negocio de la venta de licor y cervezas en la cercanía de escuelas, la Coordinación de Seguridad Universitaria de la UdeG lleva a cabo talleres que concientizan a los estudiantes y padres de familia.

Desde la regiduría del Ayuntamiento se hacen peticiones a la Dirección de Inspección y Vigilancia para que sean más estrictos aplicando la ley y multen a los que persistan en vender bebidas prohibidas a menores de edad.

CLAVES
¿Cuáles son las sanciones?


Permisos Multa de hasta 11 mil 439 pesos a quien carezca de los avisos en los que se anuncia la prohibición de ingresar a menores de 18 años de edad.

Prohibición Multa de 23 mil 551 a quien permita la entrada a menores de edad a los establecimientos, salvo que se trate de eventos en los que no se vendan o consuman bebidas alcohólicas.

Consumo Multa de 47 mil 103 a quien venda o suministre bebidas alcohólicas a menores de edad.

LA CIFRA

400 metros, la distancia mínima entre una escuela y un bar o una licorería, según la Ley General de Educación.

200 metros, la distancia mínima entre un bar o licorería y las escuelas, según los reglamentos municipales.

55.2% de las personas que consumieron alcohol, lo hizo por primera vez a los 17 años o menos.

271 licencias para cantinas, bares, restaurantes y licorerías se han otorgado en Guadalajara desde 2010.

9 millones de personas tienen problemas de alcoholismo en México.

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