GUADALAJARA, JALISCO (24/OCT/2016).- Rorro y Jesús llegan entusiasmados a una cancha en la Colonia Valle del Sol, en Tonalá. Con cuidado, colocan un costal con botellas pet sobre la báscula, mientras Andrea García y su equipo toman nota. La joven les entrega una ficha que simboliza su ganancia; la próxima semana estos niños podrán intercambiar este vale por alimentos y productos para el hogar.Así es como trabaja el colectivo PROTrash, una iniciativa que surgió como un proyecto estudiantil, que busca fomentar el crecimiento social en zonas marginadas de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) a través del intercambio de basura reciclable por alimentos.“PROTrash es una iniciativa que busca darle valor a la basura, de esta manera poder generar un ingreso extra en zonas vulnerables, por medio de un recurso que ellos mismos generan, botellas pet, por ejemplo”, explica Andrea García.El colectivo se acerca a colonias vulnerables de la ZMG, una vez ahí dialoga con la comunidad para que obtengan un beneficio: los ciudadanos deben de mantener sus calles limpias y recolectar la basura reciclable. Por su parte, PROTrash lleva esos desperdicios a sitios donde estos desechos son cambiados por dinero.Posteriormente, los jóvenes de PROTrash compran comida no perecedera y productos para el hogar a bajo costo, que son intercambiados con los ciudadanos que recolectaron basura reciclable.El reto de PROTrash es incrementar el ingreso y las oportunidades para las personas en un mediano plazo. El colectivo prevé lanzar una tarjeta de despensa para que los beneficiados obtengan recursos, se acumulen en el plástico y puedan intercambiar sus puntos por alimentos y productos en tiendas con las que se buscará crear convenios.Comunidad unida y limpiaEn un baldío de la Colonia Valle del Sol, en Tonalá, los niños juegan alegremente con los integrantes del colectivo PROTrash. Hace calor, y apenas alguien se acaba el líquido de una botella de agua para refrescarse, todos los pequeños compiten para recogerla y colocarla en una bolsa para reciclar.Yuritzi Jiménez lleva más de 20 años viviendo en la colonia y ha visto pasar varios gobiernos municipales. Señala que pocos voltean a ver a la zona, sin embargo, desde que PROTrash llegó con su programa a la colonia, ha visto una mejora notable: las calles están más limpias y los vecinos se organizan mejor para evitar arrojar basura en vía pública.“La colonia se ha visto más limpia, por ejemplo, los parques siempre se veían plásticos, basura, de todo, y ahora ya no encuentras eso. Si ves basura, alguien la recoge y se la llevan para su montón. PROTRash trae un beneficio económico y ecológico, y familiar, porque todos en casa sabemos que debemos recolectar y limpiar”.La joven asegura que los niños son quienes más participan en la recolección de basura. Entre juegos, los pequeños buscan los desechos reciclables, ayudan a su familia y son los primeros en llegar al encuentro con PROTrash cada fin de semana para intercambiar sus productos por alimentos, después, siguen jugando.SABER MÁSComprometidos con la iniciativaPROTrash está integrado por Yuvia López, Valeria Sánchez, Andrea García, Mónica López, Giovanni de Cisneros y Víctor Daniel Ramírez, así como diversos colaboradores y prestadores de servicio social.
