Continúan denuncias contra autoridades en torno a la Presa El Zapotillo

GUADALAJARA, JALISCO (12/DIC/2010).- Luego de girar una denuncia a diversos medios informativos, en la que consignaban presuntas amenazas contra activistas opositores a la Presa El Zapotillo, e incluso a periodistas involucrados en la cobertura de los padecimientos sociales en el pequeño poblado de Temacapulín, condenado a desaparecer bajo el agua cuando el embalse vea la luz, la Asociación Nacional de Abogados Democráticos A.C. (ANAD), reiteró su denuncia y expuso varios puntos en concreto.

Primero, y utilizando un comunicado como vía de información, la organización describió que el pasado 8 de diciembre el Gobierno de Guanajuato “amenazó” y “hostigó” a los defensores de derechos humanos Gustavo Lozano y Marco von Borstel, así como a la periodista Jade Ramírez, “dado el contexto de criminalización y represalias en contra de los asesores y pobladores de las comunidades Temacapulín, Palmarejo y Acasico”, mismas que serían inundadas para dar cabida al millonario proyecto.

Ese día, describe el texto, el abogado Gustavo Lozano abandonó su domicilio y al regresar se percató que varias de sus pertenencias no se encontraban. “Sus cosas se encontraban desordenadas, sobre todo en su cuarto de trabajo, del que extrajeron documentos personales, su computadora y su cámara, no obstante no se llevaron dinero que se encontraba a la vista”.

ANAD denunció que esta es la segunda ocasión en que sucede un acto de esta naturaleza en contra del litigante.

El gremio de abogados añade en su documento que durante el evento "Los Avances del Acueducto de la Presa El Zapotillo", orquestado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Comisión Estatal del Agua (CEA) de Guanajuato, la reportera Jade Ramírez fue impedida de ingresar, bajo el pretexto de que “venía con los quejosos”.

Por otra parte, denuncia que Marco von Borstel fue custodiado por oficiales de la Policía estatal de Guanajuato al abandonar ese mismo evento, y que incluso elementos del Instituto Nacional de Migración (INAMI) trataron de detenerlo, pues se había involucrado en una protesta de ecologistas que se desarrollaba a la par del evento de Conagua.

“Le pidieron que se identificara como mexicano, acto discriminatorio y arbitrario, pues a ninguno de sus acompañantes le solicitaron lo mismo”.

La ANAD lamentó que las amenazas continúen, e incluso efectuó un llamado a las autoridades “a conducirse por los marcos legales, estableciendo el diálogo y no una imposición, mucho menos amenazando o criminalizando la lucha social y la defensa de los derechos humanos”.

Entre varias peticiones, demandan que se garantice la integridad física, psicológica y jurídica de todos quienes integran el movimiento de oposición a la Presa El Zapotillo, y que el proyecto “se suspenda de inmediato”.