Comparecencias ''light'' en el Congreso local

GUADALAJARA, JALISCO (19/FEB/2013).- Ante diputados con una actitud relajada y sin muchos cuestionamientos incisivos hacia los cuatro funcionarios estatales a los que les tocó comparecer en el Congreso local, transcurrió ayer la glosa del VI Informe de Gobierno del Poder Ejecutivo.

El primero en la fila fue Antonio Muñoz Serrano, secretario de Salud, quien sería el más increpado de los cuatro funcionarios comparecientes, debido al incumplimiento de metas en atención a la salud mental en niños y detección de cáncer de mama.

Luego pasaron Antonio Gloria Morales, quien fue cuestionado sobre presuntas irregularidades en el Comité Administrador del Programa Estatal de Construcción de Escuelas (CAPECE), y Miguel Ángel García Santana, de Desarrollo Humano, quien destacó las labores de combate a la pobreza extrema.

Con el último en la fila, Alejandro Cravioto Lebrija, tampoco hubo pique. Los legisladores lo cuestionaron por temas como el derrumbe de fincas de valor artístico relevante, que el funcionario atribuyó a dos motivos: un “afán de negocio” y los permisos que otorgan los municipios, incluso cuando saben cuáles son las casas que están catalogadas.

También dijo que la Secretaría de Cultura tiene una limitante para defender el patrimonio, pues la Ley del Patrimonio Cultural y Natural del Estado no otorga a las dependencias facultades punitivas; pidió, por tanto, promover la aprobación de más “dientes” para defender el patrimonio del Estado.