Jalisco | En tres patadas por Diego Petersen Farah Chica la tuya Cuando una mujer llegó a reclamarle a su marido por la casa chica, éste le contestó sin tapujos: ''Casa chica la tuya, que no tiene ni jardín ni alberca'' Por: EL INFORMADOR 29 de marzo de 2011 - 04:22 hs Diego Petersen Farah. / Cuando una mujer llegó a reclamarle a su marido por la casa chica, éste le contestó sin tapujos: “Casa chica la tuya, que no tiene ni jardín ni alberca”. Más o menos esa es la relación que tiene el Grupo Universidad con el PRD en Jalisco. El Partido de la Revolución Democrática fue el primer amor del grupo que hoy tiene el control de la UdeG, pero el cariño por el PRI ahora es más grande e importante. La Federación de Estudiantes de Guadalajara fue tradicionalmente priista. En Jalisco eran prácticamente un cuarto sector del PRI, al lado del campesino, el obrero y el popular. Tenían distritos asignados, cuotas de poder y prebendas verdaderamente extrañas, tal como las tenían otros sectores. Si la CNOP tenía los mercados y los obreros los taxis, los estudiantes tenían los estacionómetros y los coyotes de tránsito. La distancia de la FEG con el PRI vino tras el asesinato de su líder, Carlos Ramírez Ladewig, y la Federación comenzó a coquetear con la izquierda, sin abandonar nunca al PRI, que seguía siendo el único sistema de acceso al poder. En la campaña del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas en 1988, la FEG aparece claramente decantada por la Corriente Democrática, y de ahí en la fundación del PRD unos meses después. Esta definición coincide con la llegada de Raúl Padilla a la rectoría de la Universidad. Para el PRD el Grupo Universidad fue, en un primer momento, un gran apoyo, pero muy pronto también un punto de desacuerdo. Sin embargo, para efectos prácticos y con todas las negociaciones intermedias por las que tuvieron que pasar, el grupo de control de la UdeG y del PRD eran, como bien lo dijo Timbiriche, uno mismo. El choque se presentó cuando el PRD le quedó demasiado chico a la clase política universitaria: dos diputaciones y unas cuantas regidurías no le eran suficiente. El PRD pasó entonces a ser la casa chica del Grupo Universidad. El amor está en el PRI y el PRD se convirtió en el presupuesto menor manejado por los grillos menores. Hace 20 años, la Universidad le aseguraba al PRD fuerza y presencia; hoy sólo le asegura enanismo y dependencia. La batalla por el control del partido que ha emprendido desde Tlajomulco y con apoyo de algunos liderazgos nacionales Enrique Alfaro va más allá de la candidatura, que la tiene asegurada por el PT y Convergencia. El PRD como casa chica perdió toda identidad y es ya la cuarta fuerza política en el Estado. El problema es que mal que bien, la casa más allá del tamaño, la tiene tomada el grupo universitario. Del resultado de la batalla dependerá en gran medida si en las elecciones de 2012 hay o no un PRD competitivo y eso puede influir en el resultado general. Por más que estén separadas, lo que pasa en la casa chica termina afectando a la casa grande. Temas Diego Petersen Farah En tres patadas Lee También NFL: Los Ravens dominan a los Chargers Oktoberfest 2024: una tarde de intercambio culturalconvivencia alemana Sociales: Santiago Méndez Díaz, bautizo y cumpleaños en familia Mototaxis burlan ley y evaden registro Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones