GUADALAJARA, JALISCO (06/AGO/2017).- A Sony, una pitbull de tres años, la utilizaban para asaltar gente en la Colonia Polanco, en Guadalajara. Hace cinco meses fue rescatada con marcas en el cuello, problemas en la piel y signos de desnutrición: su dueño no ha sido sancionado.A pesar de que entre julio de 2014 y mayo de 2017 la Fiscalía inició 212 averiguaciones y carpetas de investigación por el delito de crueldad contra los animales, la autoridad judicial sólo dictó en 2015 dos resoluciones: ambas en sentido condenatorio.Jorge León, encargado de delitos varios en la Fiscalía, rechazó que esto signifique que la legislación sea letra muerta. “No es tardanza, sino el proceso que se lleva para investigar cada una de las carpetas. Solicitamos los dictámenes periciales, en ocasiones no acude el denunciante a la primera cita”, explicó el funcionario.Uno de los cambios con la mencionada ley fue la indicación para que la Fiscalía creara la unidad especializada contra el maltrato animal, a la cual aún no se le asigna presupuesto. León dijo que aunque no hay dinero, sí hay personal que atiende las denuncias en las oficinas de Calle 14. “Hay dos actuarios y un titular del Ministerio Público. Si una persona presenta una denuncia por escrito, lo hace en Oficialía de Partes, que lo turna con nosotros”.Merilyn Gómez Pozos, directora de Gestión Integral de los Derechos de los Animales del Ayuntamiento de Guadalajara, consideró que aunque el fiscal Eduardo Almaguer ha mostrado interés en la lucha contra el maltrato, existen pendientes en la dependencia que dirige.“Es un tema de presupuesto y capacitación de las personas, está complicado que le den atención a delitos que no conocen. El encargado de atender estos temas debería tener conocimientos mínimos, pero los MP (agentes del Ministerio Público) no saben”.
