Carta del lector: Leticia Stettner Terrazas

Carlos Álvarez Del Castillo Gregory
Editor - Director
“El Informador”
Guadalajara, Jal. México

Mucho me extrañó que en el periódico “El Informador” cuya edición tú presides, apareciera el viernes 4 de agosto varios artículos acerca de los que incorrectamente llaman agitadores profesionales, lo anterior, en relación a la marcha realizada el 29 de agosto en protesta por los proyectos de las líneas dos y tres del Macrobús.

Por si no estás enterado, la línea número uno del Macrobús ha sido proyectada en detrimento de la ciudadanía, particularmente de los más desprotegidos ya que no solamente afecta su economía, incrementa el tiempo que los trabajadores invierten en llegar a su destino, y los pone en riesgo por el inoperante sistema para abordar, descender y cruzar la calle, lo que ha cobrado vidas de algunos de los cautivos usuarios, sin olvidar el perjuicio sufrido en el flujo económico de los negocios aledaños, incidiendo todo lo anterior en la grave situación económica que sufre México y en especial Jalisco cuyo gobierno ha actuado totalmente ajeno a las necesidades de la ciudadanía, careciendo de absoluta sensibilidad social.

Todos los que estamos interesados en el bien de Jalisco nos oponemos a proyectos que se han planeado para beneficiar con sumas millonarias a los que imponen sus reglas sin respetar la opinión pública, violando impunemente las leyes.

Necesitamos más de esos agitadores profesionales, quienes lejos de obtener un beneficio tienen que poner de su peculio para solventar los gastos en la lucha de los derechos de quienes menos tienen.

Es inaudito que hasta en el editorial del viernes 4 se han dedicado a devaluar el esfuerzo de luchadores sociales cuyo único interés es la justicia y equidad de los ciudadanos, a la que yo me adhiero. Me duele mi gente abusada por puñado de corruptos que temen perder la jugosa tajada y abusando del fuero que el pueblo les confirió, han olvidado todo pudor y están dispuestos a mandar matar, enviando golpeadores contra los que utilizan los medios que la ley autoriza para inconformarse.

¡Ojala¡ Y no estés en la lista de los que han sido invitados a participar del pastel; sería un acto indigno contra la memoria de tu abuelo, quien fuera fundador del periódico “El Informador”.

Atentamente.
Leticia Stettner Terrazas
A 05 de septiembre del 2009