Capturan a hombre involucrado en parricidio

GUADALAJARA, JALISCO (02/MAY/2010).- Por tener rencillas y problemas –desde hace tiempo– por unos terrenos, un sujeto dio muerte a balazos a uno de sus primos en la localidad de Puentecillas, del Municipio de Tomatlán, el pasado 25 de abril.

Se trata del presunto responsable Rosalío Mariscal Dueñas, de 33 años de edad, quien tiene su domicilio en la calle Emiliano Zapata.

A él se le señala como causante de la muerte de Juan Pacheco Mariscal, de 36 años, vecino de la calle Benito Juárez, ambos con residencia en la localidad de Puentecillas, en Tomatlán, Jalisco.

El ahora muerto fue llevado al hospital de primer contacto en Tomatlán, el pasado 25 de abril, una hora después de la medianoche y según el médico que lo revisó ya no tenía signos vitales. Presentaba 13 heridas de proyectil de arma de fuego (perdigones) distribuidas en la parte alta del hombro y brazo izquierdo, que se determinó con la autopsia fueron penetrantes de tórax y la causa de muerte.

Un testigo del crimen señaló a Rosalío Mariscal como el causante, y dijo que alrededor de las 00:15 horas, se presentó en la calle Benito Juárez, cerca de la “placita” de Puentecillas, a bordo de una camioneta Windstar y sin mediar palabra ni bajar del automotor disparó contra Juan Pacheco, utilizando una escopeta, además de que otras dos personas dijeron que poco antes lo vieron portando el arma y preguntando por el ahora muerto.

Posteriormente, el presunto agresor fue detenido por la Policía Municipal de Tomatlán, en la localidad de Campos Acosta, cuando transitaba en una camioneta Ford Windstar, color rojo, modelo 1998, y con placas H-240480, de Illinois. Al ser puesto  a disposición de la Procuraduría del Estado (PGJE), Rosalío Mariscal reconoció su participación y dijo que todo fue porque él y su primo Juan, tenían problemas por unas tierras, además de que tuvieron un altercado el 24 de abril de este año, durante una charreada que se celebró en el pueblo. Aseguró que el arma de fuego la tiró después de los hechos y no pudo precisar el lugar exacto, aunque señaló que era calibre .20.

Por su parte, el Ministerio Público de Tomatlán, perteneciente a la Delegación Regional de Puerto Vallarta, consignó a Rosalío Mariscal por el delito de parricidio, y lo puso a disposición del juez Primero de lo Penal en Puerto Vallarta, por lo que quedó internado en el Centro Integral de Justicia Regional de la zona.

Al analizar el caso, el Juez calificó ilegal la detención por no haber sido realizada en flagrancia; sin embargo, la PGJE, con base en una orden de aprehensión que obtuvo del mismo juzgador, recapturó al presunto parricida cuando salía del reclusorio.