Ayuntamiento de Guadalajara empleará nueva técnica para borrar graffiti

GUADALAJARA, JALSICO.- Para combatir el graffiti que aqueja a la ciudad, el Ayuntamiento de Guadalajara utilizará una nueva tecnología, que sólo se había implementado en Guanajuato.

El responsable del programa, Daniel Ruvalcaba, explicó que a partir del lunes se utilizará una máquina que funciona con aire a presión y bicarbonato de sodio para borrar los letreros realizados con pintura en aerosol.

El funcionario detalló que las pruebas técnicas comenzaron desde ayer en el Parque Ávila Camacho, en donde se retirarán 600 metros cuadrados de graffiti en muros, cantera y árboles.

En la ciudad, las primeras áreas de intervención serán vialidades como Hidalgo, Juárez, López Mateos y Lázaro Cárdenas. En la Zona Centro, se implementará en lo que se denomina “el primer cuadro” que comprende de Avenida La Paz a Hospital y de Federalismo a la Calzada Independencia.

“En la ciudad es la primera vez que utilizamos este método, anteriormente utilizábamos una hidrolimpiadora que funcionaba con arena sílica y agua. Con el bicarbonato de sodio eliminamos la necesidad de utilizar agua”.

Además de ser una opción más ecológica, Daniel Ruvalcaba, indicó que esta técnica representará un ahorro de aproximadamente dos millones de pesos anuales, toda vez que el bicarbonato de sodio que se utiliza como sustancia activa, rinde más metros cuadrados por cada kilo.

“Con agua y arena el costo es como de 25 pesos el metro cuadrado y con esta técnica nos cuesta a 15 pesos el metro cuadrado. Es más redituable y más rápido. Lo que antes hacíamos en seis horas, ahora los hacemos en tres”.

Actualmente la Dirección de Mejoramiento Urbano retira aproximadamente 26 mil metros cuadrados de graffiti por mes.

De acuerdo con los reportes de la dependencia, las zonas más afectadas por esta problemática son Oblatos, Cruz del Sur y Huentitán, aunque también se presenta con importancia en monumentos y espacios públicos como la Plaza Juárez.

Según el funcionario, la apuesta del municipio es desalentar la práctica del graffiti con una política de respuesta inmediata al fenómeno.

“No es una lucha, sino que se trata de frenar un poco el graffiti. Si los muchachos rayan, nosotros vamos y lo borramos. Si ven ellos que rápido y constantemente se está quitando su graffiti, te dejan esa barda en paz”.

La máquina tuvo un costo de 600 mil pesos y se espera que los próximos se autorice la compra de otra para aumentar la capacidad de respuesta del municipio.

EL INFORMADOR / GILBERTO FRANCO