Lunes, 25 de Noviembre 2024
Jalisco | Estrategia de la Semarnat incluye a 113 municipios

Anuncian acciones para rescatar la Cuenca Lerma-Chapala

Destaca el saneamiento de afluentes, mayor compromiso por parte de industrias y fortalecer la justicia ambiental

Por: EL INFORMADOR

GUADALAJARA, JALISCO.-La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha abierto la consulta pública de la “Estrategia general para el rescate ambiental y sustentabilidad de la Cuenca Lerma-Chapala”, que tiene como objetivo resolver las problemáticas de la región e implementar acciones inmediatas para realizar el próximo año en las 12 subcuencas de la zona.

La estrategia contempla la creación de cinco Comisiones de Cuenca, órganos auxiliares del Consejo de Cuenca, para que dentro del ámbito estatal se realice un ejercicio similar de planificación participativa para elaborar programas subregionales de desarrollo. Estos comités deberán ser presididos por los mandatarios estatales, responsables legalmente de la planificación del desarrollo dentro de sus entidades federativas.

El proyecto incluye una lista exhaustiva de los obstáculos que frenan el desarrollo en la zona y establece 162 acciones prioritarias en 113 municipios, que incluye ejes para propiciar una agricultura más competitiva y una industria más comprometida social y ambientalmente, ofrecer las mismas oportunidades a todas las comunidades de la región, sanear integralmente los afluentes, crear Comisiones de Cuenca por subregión estatal, donde participen todos los sectores, y fortalecer la justicia ambiental.

El documento plantea que en el Plan Nacional de Desarrollo se estipule que el secretario de Hacienda coordine los trabajos y lineamientos del proyecto, porque se pretende que el Ejecutivo Federal lo acepte y se haga un programa obligatorio para todo el Gobierno Federal.

El proyecto lo realizó el Grupo Técnico de Trabajo, integrado por las delegaciones estatales que tienen injerencia en la cuenca de la Semarnat, la Subdirección General Técnica del Organismo de Cuenca Lerma-Santiago-Pacífico de la Conagua, el Instituto Nacional de Ecología, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ( Profepa), la Comisión Nacional Forestal ( Conafor), la Comisión Nacional para el Conocimiento y el Uso de la Biodiversidad y el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).

La estrategia también contempla 54 obstáculos para la recuperación de la cuenca, y que tienen que ver con las dependencias de Gobierno. Un ejemplo es que la Profepa debe fortalecer la inspección y vigilancia, o que se requiere tener un sistema de registro de servidores públicos sancionados.

Ramón Giles López, subdirector de Cuencas de la Semarnat, declaró hace un mes en Guadalajara que muchas de las acciones podrían implementarse el próximo año, pero la crisis económica podría frenar la ejecución de algunas de éstas.

En su opinión, es necesario que se elaboren programas regionales y subregionales que permitan unir compromisos para poder coordinar y conciliar una serie de intereses.

Las primeras tareas

-Reglamentar la cuenca para salvaguardar los derechos de la población y su patrimonio ante la ocurrencia de fenómenos naturales extremos y riesgos derivados de las actividades productivas, para lo cual es necesario fortalecer el marco jurídico relacionado con los recursos naturales, disminuir la vulnerabilidad de la población por la invasión de cauces y zonas federales e  implementar programas permanentes de cauces y desazolve.

-Impulsar una agricultura más competitiva y una industria social y ambientalmente comprometida, que requiere ampliar y modernizar la red de medición y monitoreo; completar el Registro Público de Derechos de Agua, realizar planes de manejo de los acuíferos, reglamentar la distribución de las aguas superficiales y subterráneas, fortalecer la inspección y vigilancia con apoyo de los municipios, proponer a la cuenca dentro del régimen de ordenamiento, eficientar el uso del agua, suelo y bosques; disminuir usuarios clandestinos y aplicar estrictamente sanciones y otorgar incentivos económicos, fiscales y financieros.

-La modernización de los sistemas hidráulicos de las unidades de riego, evitar prácticas agropecuarias que requieren usos excesivos del recurso, ampliar los canales de comercialización de los cultivos, reconvertir el patrón de cultivos e intercambiar aguas residuales tratadas por aguas de primer uso.

-Ofrecer igualdad de oportunidades para todas las comunidades, que implica llevar programas para el desarrollo urbano y rural e instalar todos los servicios básicos.

-Concluir el programa de tratamiento de aguas residuales municipales, industriales y pecuarias, así como implantar soluciones tecnológicas orientadas a la reducción de las descargas, al tratamiento del agua en las fuentes de generación y al reuso; fortalecer las actividades de inspección y vigilancia, instrumentar sistemas de tarifas que consideren el pago de servicios de saneamiento, desarrollar un programa integral para el manejo y disposición de los residuos sólidos en la cuenca, fomentar la disminución del uso de plaguicidas, fungicidas y pesticidas altamente nocivos para la salud humana y el ambiente.

-Consolidar el ordenamiento territorial y ecológico por municipio, fortalecer mecanismos de regulación para los cambios de uso de suelo, regular la asignación de derechos de agua, nuevos pagos por servicios ambientales, acciones para mejorar suelos, mayor control de malezas acuáticas, reforestar y rehabilitar sistemas ribereños y lacustres.

Acciones inmediatas en Jalisco para la Subcuenca Chapala

-Reforzar el Programa Nacional de Auditoría Ambiental, como programas de Municipio, Cuenca e Industria Limpia.

-Diseñar planes de desarrollo urbano que controlen la expansión del crecimiento urbano hacia la zona del lago y revisar las concesiones en terrenos del lago.

-Establecer buenas prácticas de administración.

-Crear consejos de planeación para el desarrollo municipal.

-Actualizar las normas ambientales.

-Instrumentar en la Región Ciénega el Programa de Ordenamiento Ecológico.

-Desarrollar mecanismos de regulación que obliguen a los centros de producción pecuaria a que tengan uso más eficiente del agua, así como a tratar sus excretas.

-Vigilar los acuerdos de cuotas con las cuencas del Alto Lerma, para que lleguen las cantidades adecuadas para recargar los acuíferos.

-Monitorear descargas urbanas que se vierten aguas arriba en las subcuencas Lerma y Alto Lerma.

-Construir rellenos sanitarios en todas las cabeceras municipales.

-Construir 20 plantas de tratamiento en los municipios ribereños.

-Detener el avance de la agricultura hacia zonas de laderas de colinas y piedemontes y contrarrestar este tipo de erosión, promoviendo cubiertas vegetales.

-Sustituir agroquímicos que no cumplan con las regulaciones internacionales.

-Incorporar técnicas de manejo de suelos, para aminorar consumo de agroquímicos.

-Establecer el Sistema Estatal de Áreas Naturales Protegidas.

-Capacitar en producción agrícola orgánica.

-Programas de reforestación.

Los ríos Lerma y Turbio son los principales agentes contaminantes


La Semarnat dividió la Cuenca Lerma-Chapala en cinco regiones. Una de ellas es la subregión Lerma-Jalisco, que a la vez está separada en las subcuencas Chapala y Zula. La primera comprende el Lago de Chapala y 38 municipios, de los cuales 19 son de Jalisco y 19 de Michoacán, y en la zona hay distintos problemas de contaminación.

“Ninguno de los ríos comprendidos en la subcuenca tiene características de excelente o aceptable, únicamente el lago de Chapala, en los municipios de Chapala y Poncitlán, es considerado como poco contaminado. El río Lerma, que cruza por los municipios de Jamay, Briseñas, Vista Hermosa, la Barca, Ayotlán, Tanhuato y Yurécuaro es considerado como contaminado, al igual que el Río Duero, que cruza por los municipios de Briseñas, Vista Hermosa e Ixtlán”, dice el documento de la Semarnat.

La mayor parte de los contaminantes se atribuyen a aguas provenientes del Río Lerma y el Río Turbio, al cual descargan los residuos de la zona industrial peletera de León y los contaminantes más comunes son bacterias patógenas, materia orgánica, grasas, aceites, detergentes, DDT, agroquímicos, metales pesados y sales orgánicas sintéticas, así como fósforo.

En el municipio de Poncitlán se ubica una fuerte actividad económica, generada por la industria textil, que es gran consumidora de agua para sus procesos y descarga grandes cantidades de residuos industriales.

Además, “hay un abuso en la utilización de agroquímicos que está generando un proceso de salinización y
eutroficación en el lago, lo cual daña severamente su ambiente”; y hay graves problemas por la  declinación en la fertilidad de los suelos, así como erosión, provocada por el uso indebido de las tierras de cultivo.

En la subcuenca del Zula la situación es similar, pues el río del mismo nombre está considerado como “contaminado”.

En toda la región habitan más de medio millón de personas, que es 5% de la población total de la cuenca Lerma-Chapala, de las cuales 60% tiene índices de marginación altos y muy altos, por lo que es de las zonas más pobres.

De acuerdo con la Conagua, la demanda de aguas superficiales es de 505 millones de metros cúbicos; 91% corresponde al uso agrícola y el resto es para uso pecuario.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones