GUADALAJARA, JALISCO (26/ENE/2017).- La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) clausuró el Rastro de Guadalajara por irregularidades en su operación.Sin embargo, el Gobierno tapatío aseguró que la operación no tiene ningún riesgo en materia de salud para los ciudadanos, como lo demuestran los resultados de evaluaciones anteriores que ha hecho la misma comisión, la Secretaría de Agricultura Ganadería y Pesca (Sagarpa) y el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria.El alcalde Enrique Alfaro expresó que la clausura temporal del rastro puede ocasionar desabasto de carne, derivar en sacrificios clandestinos y provocar un aumento de precios por la especulación. Además, aseguró que la medida fue exagerada y señaló que la acción pudiera ser motivada por intereses de otra naturaleza: “Porque desde Guadalajara levantamos la voz contra los abusos que ha cometido el Gobierno federal, que sea revancha contra nuestro Gobierno”.El funcionario explicó que algunos señalamientos, como que faltaba un rollo de papel en sanitarios o que en una esquina de un techo había telarañas, ya fueron solventados, excepto la construcción de una barda que divida el área de sacrificios de cerdos con bovinos y que podría tardar unos días. “Hay que tomarlo con calma, vamos a tratar de revisar este tema de inmediato. Hay que estar tranquilos, vamos a hablar con el gobernador sobre el tema para ver si puede echarnos una mano”.José Ángel González, director del rastro municipal, puntualizó que en materia económica el rastro mueve de 25 a 30 millones de pesos diarios.Según indicó el Gobierno tapatío, el Rastro de Guadalajara es el más importante y grande del país y el que surte más de 80% de este producto en el Área Metropolitana, con un promedio de más de 600 reses, de 600 a 800 cerdos y aproximadamente 200 ovicaprinos cada día.