Acuden pocos a celebrar octavo aniversario de mártires cristeros

GUADALAJARA, JALISCO.- Aunque se lanzó una amplia convocatoria y con varios días de anticipación, fue escasa la respuesta de los católicos de Guadalajara a la invitación de la Arquidiócesis tapatía para celebrar el octavo aniversario de la canonización de los mártires de la Guerra Cristera, pues sólo asistieron alrededor de 700 feligreses a la misa celebrada ayer por el cardenal Juan Sandoval Íñiguez en el Cerro del Tesoro.

En la capilla provisional del predio donde se construye el Santuario de los Mártires, instalado en la polémica permanente desde que el gobernador de Jalisco, Emilio González anunció un donativo de 90 millones de pesos para su edificación, el cardenal Sandoval Íñiguez celebró una eucaristía en la que consideró que la paz en el país se debe a la intercesión de los mártires cristeros.

“La paz que hemos gozado, la libertad religiosa, la fe y otros bienes, se la debemos seguramente a la intercesión de los Santos Mártires que murieron por nosotros”.

El purpurado consideró sin embargo que “hay problemas sociales, nubarrones en el horizonte, hay problemas serios en el país, pero con la ayuda de Dios, nuestra responsabilidad de mexicanos, de cristianos, y la intercesión de los mártires, saldremos adelante, así se lo pedimos al Señor en esta santa eucaristía”.

Después de la celebración, el arzobispo invitó a los asistentes a recorrer la zona y constatar el avance de las obras.

Apenas el 21 de marzo pasado, entrevistado durante las celebraciones del Viernes Santo, el cardenal Sandoval adelantó que de seguir el avance del proyecto para el Santuario, éste quedaría terminado en cuatro años, es decir en el 2012.