ZAPOPAN, JAL.- Ayer a las 17:40 horas falleció en el Hospital General de Occidente el niño Miguel Ángel López Rocha, a causa de un “paro cardiorrespiratorio secundario a fallas orgánicas múltiples, e intoxicación aguda por arsénico”, tras una hospitalización de 18 días, según informó oficialmente la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ). El pequeño, de ocho años, presuntamente cayó a las aguas del Río Santiago; vivía en la colonia La Azucena, en Juanacatlán. Más temprano, ante las críticas y denuncias por parte de vecinos de Juanacatlán y El Salto, debido a la contaminación del Río Santiago, la SSJ anunció que realizará un muestreo aleatorio en habitantes de ambas poblaciones, con pruebas de orina para detectar metales pesados; en esos momentos Miguel Ángel agonizaba. En el Senado de la República, ayer mismo se aprobó con carácter de urgente el exhorto a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), para que declare a los municipios de El Salto y Juanacatlán como “zona de emergencia ambiental”. También se aprobó integrar un grupo de senadores para que realice un recorrido por la zona y verifique “la grave situación que viven sus habitantes”. La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco también emitió un pronunciamiento dirigido al gobernador Emilio González, para declarar “zona de emergencia ambiental” la cuenca del Río Santiago. El titular de la SSJ, Alfonso Gutiérrez Carranza, tras reunirse con pobladores e integrantes de organizaciones civiles, les aseguró que el próximo lunes, en conjunto con los alcaldes de ambos municipios, practicarán exámenes de orina para descartar nuevos casos con presencia de metales pesados, específicamente arsénico. Se pretende tomar 10 muestras en cada municipio, escogidas al azar por los propios presidentes municipales, para luego ser enviadas a la experta Luz María Cueto Sánchez, fundadora del Colegio de Toxicología de Jalisco, quien se encargará de analizarlas. “Lo que queremos es darnos cuenta si (lo de) este niño solamente fue una intoxicación aguda —como se ha manejado—, o si existe realmente más riesgo a la población. No lo vamos a ocultar. En el momento en que nosotros tengamos los resultados, se harán públicos”, prometió Gutiérrez Carranza, quien ocultó el diagnóstico y medicamentos recetados al menor cuando ingresó grave al hospital. “Tenemos que buscar todos los posibles efectos que pudiera tener este río, porque nosotros no estamos aceptando que el río sea o no sea. Yo quiero, como secretario de Salud, la certeza de si es un caso único o es un caso aislado, quiero tener resultados externos de la secretaría para saber si existen problemas en el resto de la población”. La decisión de este muestreo fue bien vista por los manifestantes, quienes no dejan de lado el olvido en que las autoridades les tienen desde hace décadas. Joel González Díaz, primer edil de El Salto, señaló que instalarán una malla metálica en la parte del Río Santiago donde presuntamente cayó el pequeño Miguel Ángel, para evitar otro accidente entre los vecinos del fraccionamiento La Azucena, que colinda con el caudal de aguas contaminadas. Entrevistado por la mañana, acerca del grave problema de contaminación del Río Santiago, el gobernador Emilio González reconoció que sólo se han adoptado “medidas paliativas”, pero justificó que “no es sencillo evacuar a la gente que habita” en los dos municipios afectados.EL INFORMADOR 14-02-2008 09:05 LNA
