Urge Zelaya sanciones hemisféricas contra golpistas en Honduras

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.- El depuesto presidente hondureño Manuel Zelaya urgió hoy sanciones hemisféricas contra el gobierno de facto de Roberto Micheletti, como las que a comenzado a aplicar Estados Unidos, para un regreso al orden constitucional en ese país.  

"El país que más ha tomado medidas es Estados Unidos, que ha cancelado visas, que ha congelado cuentas y que ha tomado muchas acciones", dijo Zelaya en una entrevista telefónica al inicio de una visita a Washington.  

"Nosotros esperamos que los otros países de América Latina sigan estos pasos y que sigan presionando", dijo Zelaya quien se reunirá este martes con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y con miembros del Consejo Permanente de la OEA.  

Señaló que Estados Unidos apoyó como mediador al presidente costarricense Oscar Arias, quien impulsa el Acuerdo de San José para su regreso al poder tras el golpe de Estado del pasado 28 de junio, una amnistía política general y el adelanto de las elecciones, entre otras medidas.  

El rechazo de los golpistas a la propuesta de Arias es "una ofensa" y "una burla" para el esfuerzo que se está haciendo en la región para una salida a la crisis, enfatizó.  

Con respecto a los esfuerzos de la OEA, Zelaya afirmó que el organismo interamericano "no ha agotado sus procedimientos" porque cada uno de los países que la integra "tiene su propia personalidad", pero que al final son varias acciones las ya se están tomando.  

Afirmó, por otro lado, que en México, donde fue recibido con honores de jefe de Estado por el presidente Felipe Calderón, tuvo un "recibimiento extraordinario" y se le dio la oportunidad de reunirse con diversos sectores en ese país.  

"Estamos frente a un reto", anotó Zelaya con respecto a los esfuerzos la OEA y Naciones Unidas para revertir el golpe de Estado, lo cual 'no se ha dado en la historia'.  

"Los únicos golpes que se revirtieron fueron golpes también militares pero revertidos por militares", dijo Zelaya al citar el fallido golpe contra Hugo Chávez en 2002 y la llegada al poder de Omar Torrijos en Panamá a fines de la década de 1960.  

"Estamos ante un hecho inédito, en el que conquistar y lograr tener éxito va a ser un gran acontecimiento para América y fracasar va a ser una gran derrota para América y para los pueblos", enfatizó.