Superan 246 los muertos por inundaciones en Filipinas

MANILA, FILIPINAS.- La cifra de muertes por las inundaciones en Filipinas llegó el martes a más de 284 entre muertos y desaparecidos mientras las cuadrillas de socorristas continúan extrayendo cadáveres de los ríos crecidos y miles de personas continúan sin recibir víveres o servicios básicos.

Las autoridades ordenaron el emplazamientos de refuerzos policiales para evitar saqueos en las poblaciones abandonadas por sus habitantes, a medida que crece la frustración entre los que perdieron sus viviendas y pertenencias.

Las cifras de las víctimas crecían de a centenares en centros de distribución de ayuda, a medida que retrocedían las aguas y más personas acudían a buscar alimentos, agua potable, ropa seca y cobijo.

La tormenta tropical Ketsana causó inundaciones en la capital y zonas aledañas que afectaron las viviendas de casi 1.9 millones de personas el fin de semana, dijo El Consejo Nacional Coordinador de Desastres.

El organismo agregó el martes que había 246 muertos a causa del tifón, y que hay 38 desaparecidos.

La presidenta Gloria Macapagal Arroyo  -sensible a las críticas de que no formuló suficientes advertencias del tifón que se acercaba o que respondió con demasiada lentitud -admitió que quedó abrumada, pero aclaró que hacía todo lo que estaba a su alcance para ayudar.

En Vietnam, Ketsana causó por lo menos 23 personas en el centro del país con vientos de hasta 144 kph (90 mph), dijeron las autoridades, que anunciaron la evacuación de 170 mil personas.

Tras cobrar fuerza sobre el sur del Mar de China, el tifón llegó a tierra vietnamita al mediar la tarde, a unos 60 kilómetros (37 millas) al sur de Danang, según el Centro Nacional de Meteorología.

Murieron dos personas en la provincia de Quang Nam al ser aplastadas por árboles abatidos, y otra falleció al ser alcanzada por un cable del tendido eléctrico, dijo el funcionario provincial Nguyen Minh Tuan.

Hubo inundaciones en Hoi An, un lugar declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, en la provincia de Quang Nam, aunque no fueron reportados daños graves.

La tormenta perdió fuerza al acercarse a Laos, y para el martes por la tarde, había dejado de llover en algunas zonas de la costa.

Empero, el caudal de los ríos sigue aumentando, y para el miércoles se pronosticaron más lluvias.

Las abrumadas autoridades han pedido ayuda internacional, advirtiendo que podrían carecer de suficientes recursos para resistir otra tormenta, que según los meteorólogos está ubicada al oriente de la nación archipiélago y podría golpearla incluso el viernes.