SEÚL, COREA DEL SUR (25/AGO/2016).- Los representantes de Corea del Sur y Estados Unidos sobre políticas relacionadas con Corea del Norte acordaron hoy buscar nuevos modos de sancionar al régimen de Kim Jong-un por el lanzamiento de un misil desde un submarino (SLBM) llevado a cabo el miércoles.El enviado para asuntos de seguridad de la cancillería de Seúl, Kim Hong-kyun, y el representante especial de EU para Corea del Norte, Sung Kim, acordaron en una conversación telefónica "valorar posibles medidas adicionales en respuesta a las provocaciones" de Pyongyang, según indicó en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores surcoreano.Ambos altos cargos "coincidieron en la seriedad y gravedad de las recientes provocaciones de Corea del Norte y se comprometieron a cooperar estrechamente para promover una reacción a nivel de organización internacional, incluyendo el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas".La conversación entre los representantes de Seúl y Washington llega un día después de que Corea del Norte lanzara el miércoles un misil desde un submarino desde su costa oriental que voló 500 kilómetros hasta caer en el Mar de Japón, en su primera operación con éxito de este tipo tras tres intentos fallidos. El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió de urgencia a puerta cerrada horas después del lanzamiento, y tras el encuentro el presidente de turno, el malayo Dato' Ramlan Ibrahim, explicó que EU va a proponer una declaración al resto de miembros y que éstos deberán aceptarla por unanimidad para que se haga oficial.El organismo rector de Naciones Unidas ya impuso en marzo fuertes sanciones a Corea del Norte que prácticamente ahogan sus relaciones comerciales con el exterior como castigo a la prueba nuclear y el lanzamiento de un cohete espacial con tecnología de misiles de largo alcance realizados a principios de año.Por su parte, Corea del Sur, EU y Japón aplicaron sus propias sanciones al margen de la ONU, también destinadas a aislar económicamente al régimen de Kim Jong-un.El desarrollo de la tecnología SLBM por parte de Corea del Norte ha generado una fuerte alarma, ya que la naturaleza móvil de los submarinos ampliaría el alcance del arsenal de misiles del Ejército Popular norcoreano y haría mucho más difícil detectar sus lanzamientos.