Protestan padres chinos, el gobierno los reprime

SICHUAN, CHINA.-Los padres de familia, muchos de ellos con fotos de sus hijos en las manos, fueron arrastrados lejos de una corte en Dujiangyan, centro turístico al noreste de Chengdu, capital de la provincia de Sichuan.

“¿Por qué?”, gritaban muchos de ellos. “Díganos algo”, expresaban mientras policías vestidos con equipo antimotines negro los jalaban.

Los padres habían estado de rodillas ante la Corte, gritando “queremos presentar una demanda”. Sus hijos eran alumnos de una preparatoria en Juyuan, cerca de Dujiangyan, donde fallecieron 270 estudiantes.

El diario Southern Metropolis News citó a un trabajador de construcción que dijo que los escombros de la escuela indicaban que se había empleado cable de hierro en lugar de barras para reforzar los muros. Los señalamientos de que los estudiantes murieron durante el sismo del 12 de mayo a consecuencia de una construcción deficiente de las escuelas han generado la ira general y la atención del público, preocupando además al gobierno, según el cual, el movimiento telúrico destruyó 7 mil salones de clase.

El número de muertos confirmado tras el peor desastre de las últimas tres décadas en China es hasta ahora de 69 mil 19, con más de 18 mil desaparecidos y unos 5 millones de damnificados, según el gobierno.

Ayer Martes mismo, funcionarios chinos se reunieron para evaluar un plan para reconstruir, lo más pronto posible, las zonas devastadas por el terremoto, mientras soldados y funcionarios de manejo de desastres buscan reducir la amenaza que representan las acumulaciones de agua creadas por los deslizamientos de tierra ocurridos durante el terremoto. Miles se han visto obligados a dejar sus refugios por el temor a inundaciones.

Según el banco alemán Deutsche Bank, la reconstrucción de la región afectada por el sismo costará más de 500 mil millones de yuanes (71 mil 700 millones de dólares) en los próximos tres años.

Las empresas chinas perdieron a causa del terremoto en el sudoeste de China unos 28 mil 800 millones de dólares, señala el estudio. Eso corresponde sólo a 0.4% del capital industrial total. Por eso, las pérdidas no tendrán efectos reconocibles en la producción industrial del exportador China.

La creciente demanda por la reconstrucción, que alcanzará su punto máximo entre fines de 2008 y mediados de 2009, por el contrario, podría estimular la producción industrial.