La declaración surgió apenas horas después de que el líder opositor Jeremy Corbyn decidió que los parlamentarios del Partido Laborista tendrán el derecho de votar independientemente sobre el tema y no tendrán que seguir la disciplina partidaria.Esa decisión se tomó después de que algunos laboristas amenazaron con abandonar la tendencia de su agrupación y apoyar a Cameron.Cameron ha declarado que no remitiría el asunto al parlamento a menos que sienta que tiene la victoria asegurada, pues de lo contrario el prestigio de Gran Bretaña en el mundo podría quedar afectado.