ROMA.- El Papa Benedicto XVI reflexionó sobre la persecución de los católicos en el mundo durante la procesión del Viernes Santo alrededor del Coliseo romano, que puso en foco el sufrimiento entre los fieles de China. El Papa, quien ha convertido a la mejora de las relaciones con China en uno de los objetivos de su pontificado, presidió la procesión del tradicional Via Crucis que conmemora la crucificación y muerte de Cristo. Junto a decenas de miles de asistentes, la solemne ceremonia nocturna es uno de los principales servicios antes de la Pascua, el punto más importante del año cristiano. El cardenal Joseph Zen Ze-kiun de Hong Kong, quien ha criticado la falta de libertad religiosa en China, escribió las oraciones de este año, que rindieron tributo a aquellos "mártires vivientes" que sufren por su fe. "En muchas parte del mundo, (la Iglesia) está sufriendo la hora oscura de la persecución", escribió Zen en una de las oraciones. Los 8 a 12 millones de católicos en China están divididos entre una iglesia aprobada por el gobernante Partido Comunista y una iglesia "clandestina" desconfiada de la intervención del Gobierno. Pekín y el Vaticano rompieron sus relaciones durante dos años después de la asunción del comunismo en 1949. Aunque no hubo una referencia explícita al Viernes Católico de China, el cardenal dijo la semana pasada que sus oraciones honraron a los católicos chinos, que "son verdaderamente un pueblo que ha sufrido mucho y está sufriendo". Persecusión, amenaza de Al Qaeda En la ceremonia del Viernes Santo, transmitida por televisión en 39 países, una mujer joven de China cargó la cruz en una noche fría con un cielo lluvioso. El Papa sostuvo brevemente la cruz al final de la ceremonia, enfrente de las antiguas ruinas del Coliseo. Zen destacó que el Coliseo fue una vez el lugar donde los primeros cristianos fueron asesinados. "Los coliseos se han multiplicado durante siglos, donde nuestros hermanos y hermanas, en distintas partes del mundo, continúan siendo hoy duramente perseguidos", escribió Zen en el mensaje que el Papa leyó en voz alta. A principios de este mes, un arzobispo iraquí fue hallado muerto en la ciudad oriental de Mosul después de ser secuestrado por hombres armados, en un ataque adjudicado a Al Qaeda por el primer ministro de Irak, Nuri al-Maliki. El Pontífice está siguiendo un intenso calendario de celebraciones de Semana Santa, pese a recientes acusaciones del líder de Al Qaeda, Osama bin Laden. El militante de origen saudí dijo en una grabación de audio emitida esta semana que la publicación de caricaturas del profeta Mahoma era parte de una "nueva cruzada" que involucraba al Papa Benedicto XVI, una acusación que el Vaticano rechazó. Funcionarios de seguridad italianos dijeron el viernes que el mensaje estaba siendo tratado como una amenaza contra el Papa, pero agregaron que no fueron necesarios cambios a la seguridad ya reforzada del Pontífice. El Papa de origen alemán lidera la Iglesia Católica de 1.100 millones de miembros hacia la tercera Pascua de su pontificado. El sábado por la noche, Benedicto XVI llevará adelante la misa de la víspera de Pascua y el domingo dará el mensaje y bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad y el mundo). REUTERS 21-03-08 IJALH