Otorgan Príncipe de Asturias a ''héroes de Fukushima''

OVIEDO, ESPAÑA (08/SEP/2011).- El príncipe Felipe, heredero de la corona de España, y su esposa, la princesa Letizia, enviaron al embajador de Japón en España, Fumiaki Takahashi, un telegrama de felicitación por el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia concedido a los llamados “héroes de Fukushima”.

En el telegrama, los príncipes de Asturias indican que “el jurado ha reconocido el extraordinario y admirable sacrificio de quienes, voluntariamente, han expuesto sus propias vidas para evitar una catástrofe medioambiental y humana de alcance mundial, en un gesto de valentía y solidaridad excepcionales”.

Los “héroes de Fukushima”, el grupo de hombres y mujeres que trabajaron en la emergencia nuclear provocada por el tsunami que asoló el Noreste de Japón el pasado 11 de marzo, fueron galardonados con el Premio de la Concordia por haber dado al mundo “un ejemplo de coraje ante la adversidad, sentido del deber, defensa del bien común y conciencia cívica”, según el jurado.

La Embajada de España en Japón y otras autoridades diplomáticas ya están gestionando la posibilidad de que una representación de los “héroes de Fukushima” recoja el galardón, según indicaron fuentes de la Fundación Príncipe de Asturias.

La embajada de Japón en España había apuntado que podría recoger el premio su representante diplomático en Madrid.

Sin embargo, la Fundación Príncipe de Asturias confía en que una representación de ese colectivo integrado por ingenieros, bomberos, soldados, policías y voluntarios pueda viajar a Oviedo, en el norte de España, para recoger el galardón en la ceremonia que se celebrará el próximo 21 de octubre.

Por su parte, la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid felicitó a los “héroes de Fukushima”, ganadores del Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2011, por galardón para el que también optaba.

En un comunicado, la organización de esta jornada destacó que los “héroes de Fukushima”, son un ejemplo de lo que Benedicto XVI aseguró en Madrid.

FICHA TÉCNICA
Crisis

La planta nuclear Fukushima, que desde día del terremoto presentó problemas para refrigerar un reactor, registró una explosión. La situación empeoraba conforme pasaba el tiempo.

Los problemas generaron una categoría de 4 en una escala de 7 en la escala Internacional de Accidentes Nucleares (INES, por sus siglas en inglés) evacuando a más de 45 mil personas.

Un mes después, el Gobierno admitió que el desastre merecía un 7 en la escala de sucesos nucleares, el mismo que tuvo el accidente de Chernóbil, y el más alto que existe.

TELÓN DE FONDO
Desastre en Japón

El pasado 11 de marzo, Japón fue azotado por un terremoto de magnitud 8.9 en la escala de Richter, el quinto sismo más fuerte registrado en el mundo. Le siguieron potentes réplicas y de un tsunami con olas de hasta 10 metros de altura, que dejaron centenares de muertos y desaparecidos;  y desencadenaron alertas en todo el Pacífico. Pocos minutos después las escenas mostraron la devastación en la zona Norte del país.

Fukushima declaró estado de emergencia en la central nuclear a causa de la falla de los sistemas de refrigeración de uno de los reactores. En un principio se evacuaron a tres mil pobladores en un radio de tres kilómetros (km) del reactor, pero al producirse una explosión en la central, las autoridades decidieron aumentar el radio a 20 km.

El primer ministro, Naoto Kan, presentó en agosto su renuncia, empujado por las críticas a su gestión de la crisis nuclear de Fukushima, que se desató en marzo.

Este mes señalaron que las víctimas mortales por el terremoto y tsunami aumentó a 19 mil, de tres mil que contabilizaron los primeros días.

Los daños causados a la economía nipona, la infraestructura y la red de transportes del país se cifran en unos 215 mil millones de dólares, incluyen las pérdidas por la crisis nuclear de Fukushima.