Obama restringe con decreto las armas automáticas

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (17/ENE/2013).- El presidente le declara la guerra a la Asociación Nacional del Rifle (NRA), una de las entidades más influyentes en la Unión Americana.

Respaldado por la conmoción provocada por la masacre en la escuela Sandy Hook de Newtown —un joven de 20 años mató a 20 niños y seis adultos en Connecticut, el 14 de diciembre—, Barack Obama lanzó la más ambiciosa ofensiva contra las armas de fuego en décadas y prometió entregarse con toda su energía a lo que será una de las apuestas de su segundo mandato, que inicia el lunes 21.

Obama enviará al Congreso una propuesta, de incierto futuro, para la prohibición, entre otras medidas, de las armas de uso militar, y en previsión de la férrea oposición que encontrará entre los legisladores amigos de la poderosa NRA, firmó varios decretos para actuar sin permiso parlamentario en la mejora de las actuales medidas de control.

“Si hay una sola vida que podamos salvar, tenemos la obligación de intentarlo. Tenemos la obligación de actuar ahora”, declaró Obama en la emotiva ceremonia organizada para presentar esta arriesgada iniciativa de 23 decretos, en la que estuvieron presentes niños, principal “arma” del Ejecutivo contra la violencia.

Entre las órdenes ejecutivas para endurecer el control de armas destaca la prohibición de comercializar armas  automáticas, la exigencia de comprobación de antecedentes criminales para todas las ventas y aumentar la cobertura médica en materia de salud mental.