Muestran en la ONU fotos de torturas en Siria

NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS (15/ABR/2014).- El Consejo de Seguridad de la ONU quedó el martes en un silencio total cuando los embajadores vieron varias imágenes espantosas de víctimas de la guerra civil en Siria, dijo el embajador de Francia. Las imágenes eran de personas esqueléticas con los huesos a la vista y algunas mostraban señales de estrangulamiento, de repetidas golpizas y les habían sacado los ojos.

El embajador francés, Gerard Araud, dijo que un profundo silencio se prolongó largo rato y entonces comenzaron lentamente las preguntas sobre la credibilidad de las imágenes de los muertos, un testimonio mudo del salvajismo de la guerra civil siria, en la que han muerto más de 150 mil personas.

Los miembros del consejo vieron más de las 10 fotos dadas a conocer públicamente en enero como parte de una investigación forense financiada por el gobierno de Catar, uno de los principales apoyos de la oposición siria y uno de los países más involucrados en el conflicto. Francia, que patrocinó la presentación en el Consejo de Seguridad y la muestra de imágenes posteriormente en una conferencia de prensa, dijo que las fotos son prueba de crímenes de guerra cometidos por el gobierno del presidente sirio Bashar al Asad.

No se pudo confirmar independientemente la veracidad de las fotos.

El Ministerio de Justicia de Siria ha descalificado las imágenes y el informe que las acompaña, a los que tachó de "politizados y faltos de objetividad y profesionalismo", un "grupo de fotos de personas no identificadas, algunas de las cuales resultaron ser extranjeros".

El ministerio dijo que algunas de las personas eran insurgentes muertos en combate y otros fueron abatidos por milicias rebeldes.

Entre las fotos nuevas estuvo una imagen de por lo menos una docena de cadáveres colocados en hilera en el piso de un almacén, mientras los envolvían en plástico, y algunos hombres en uniforme militar parados entre ellos.

David M. Crane, uno de los autores del reporte y ex fiscal especial de Sierra Leona, dijo que era una prueba firme "de matanzas sistemáticas industrializadas".

"Los cadáveres entraban y salían. Fue un procesamiento muy sistemático de seres humanos. Los colocaban en un estacionamiento porque no cabían en la morgue", dijo Crane.

"Agonizaron durante meses por hambre y tortura, y después los ejecutaron casi con misericordia", aseveró Crane. "¿No les resulta similar a las imágenes (de los campos de concentración nazis) de Dachau, Auschwitz y Bergen-Belsen?", observó Crane, frente a las horribles imágenes que proyectaban a su espalda en una conferencia de prensa de la ONU.

"Las espantosas imágenes de los cadáveres con señales de inanición, estrangulamiento y golpizas, y el escalofriante informe de hoy, indican que el régimen de Asad ha llevado a cabo una matanza sistemática, amplia e industrializada. Cualquiera que vea estas imágenes cambiará como persona para siempre", dijo Samantha Power, embajadora de Estados Unidos ante la ONU.

Las fotos se escogieron entre 55 mil de torturados y asesinados en la guerra civil de Siria que se informa fueron sacadas del país.

El rostro y los genitales de las víctimas en las fotos se mostraron borrosos "por un asunto jurídico y ético para proteger la decencia de las víctimas" y para que los familiares no los identifiquen y se enteren en una conferencia de prensa de su asesinato, dijo el doctor Stuart J. Hamilton, patólogo forense. También se mostraron borrosos o sencillamente se ocultaron en negro los números de identificación de los cadáveres, así como marcas de identificación de los cuerpos, como cicatrices, tatuajes y marcas de nacimiento.

El salvajismo de los últimos momentos de las víctimas era obvio. Una foto del rostro de una víctima mostraba que le habían sacado un ojo y una mancha de sangre a pocos centímetros de la cavidad ocular en el suelo junto a la cabeza.

Otros cadáveres mostraban marcas paralelas que según Hamilton son una conocida consecuencia de golpes con una barra. Las marcas dejan dos verdugones con un espacio indemne en el medio. Uno de los cadáveres tenía varias marcas de ese tipo en el torso. "En una situación de combate, la persona se mueve", explicó Hamilton, de manera que los golpes no tienen un patrón regular.