Internacional | El ‘Obama mongol’ prometió también beneficiar a su país con los abundantes recursos mineros de su país Mongolia esperanzada con la llegada al poder de su propio ‘Obama’ Tras el cambio de un mandato comunista por el demócrata en mayo pasado los mongoles consideran a Tsakhiagiin Elbegdorj como su ‘Obama’ local Por: EFE 20 de julio de 2009 - 07:42 hs ULAN BATOR, MONGOLIA.- Los mongoles, que en mayo pusieron fin a casi un siglo de mandato comunista con la elección del demócrata liberal Tsakhiagiin Elbegdorj, han puesto toda su confianza para salir de la miseria en este hombre al que consideran su "Obama" local. Es nuestro propio Obama, señaló a EFE Gana, un joven agente inmobiliario que tiene que trabajar en hoteles durante el verano, en una comparación entre Elbegdorj, de 46 años y conocido ya como el pequeño presidente mongol, por su estatura física, y Barak Obama, el popular líder de Estados Unidos. La crisis nos ha afectado mucho, el sector inmobiliario local está parado, sólo en verano hay algo de trabajo en los hoteles, explica el joven, uno de los miles de graduados mongoles que se enfrenta al fantasma del desempleo, que se calcula en un 30 por ciento real. Este enigmático y gélido país encajado entre China y Rusia y con una población de 2.7 millones de habitantes cuya tercera parte vive por debajo del umbral de la pobreza, sufrió hace un año unas revueltas "a la iraní", cuando la capital, Ulan Bator, fue escenario de unas violentas protestas por supuesto fraude electoral en las que murieron cinco personas y más de 300 resultaron heridas. Miles de ciudadanos clamaron entonces contra el supuesto fraude en las elecciones legislativas del 1 de julio de 2008 en las que el gobernante Partido Revolucionario Popular de Mongolia (PRPM, ex comunista) obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones al Gran Hural (legislativo). El entonces presidente, Nambaryn Enkhbayar, conocido entre su pueblo como el "presidente grande", por su tamaño corporal, decretó cuatro días de estado de excepción. Fue el actual presidente, hijo de un veterano del ejército y de una pastora nómada, quien desató la protesta al denunciar la compra de votos por parte del PRPM para el Gran Hural, donde esta formación consiguió en una primera votación 47 de los 76 escaños del ente, aunque en un posterior recuento se quedó con 39. Pero en las pasadas elecciones del 25 de mayo, Elbegdorj y su formación, el Partido Democrático (PD), lograron un 51 por ciento que puso fin a 88 años de hegemonía del PRPM, el partido gobernante bajo la alianza con la extinta Unión Soviética, entre 1921 y 1996, y posteriormente elegido en los comicios de 2000, 2004 y 2006, en esa última ocasión en coalición con otras formaciones. Somos un país democrático, no pueden parar la voluntad del pueblo, explica Erden, un antiguo empleado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Mongolia, optimista con las nuevas perspectivas que Elbegdorj promete, mientras contempla las ruinas de la antigua sede del PRPM, incendiada durante las revueltas. Periodista de formación y creador de los primeros medios independientes del país, Elbegdorj encabezó en la década de 1990 una revolución pacífica, influido por la Perestroika y el Glasnost soviéticos, que trajo la democracia a este país de nómadas esteparios, herederos pobres del implacable imperio que Guenguis Jan forjó en el siglo XIII y que se extendía desde el Sudeste Asiático hasta Europa. Antiguo obrero del cobre, el nuevo presidente estudió Periodismo y Marxismo-Leninismo en Ucrania bajo el mandato soviético, donde conoció a su esposa, Bolormaa Khajidsuren, y después de su primer cargo de primer ministro, en 2001, obtuvo un título de economista por la Universidad de Boulder Colorado (EU), y posteriormente un Máster en Administración Pública en Harvard. El matrimonio tiene cinco hijos propios y otros 20 huérfanos adoptados a través de la Fundación Bolor, auspiciada por la esposa. Elbegdorj tendrá que cumplir a partir de ahora sus promesas anticorrupción, promovidas durante una campaña para muchos populista, aunque para algunos no va a ser sencillo: Unos creen que promoverá un cambio, otros que sucumbirá él mismo a la corrupción, explica Jerome, un holandés residente en el país asiático desde hace años que subraya la marcada corrupción local. El "Obama mongol" prometió también beneficiar a su país con los abundantes recursos mineros de su país, principalmente cobre, oro, uranio, plomo y carbón, que hasta ahora han sido explotados por empresas extranjeras. Son nuestros recursos, y Elbegdorj es economista, podrá desarrollar el país con ellos, asegura Erden, resumiendo un deseo popular que pone en peligro las negociaciones pendientes con multinacionales extranjeras del sector minero. En efecto, la semana pasada el Gran Hural decidió negar exenciones fiscales para la anglo-australiana Rio Tinto y su socio canadiense Ivanhoe Mines, con las que el anterior gobierno negociaba un proyecto de tres mil millones de dólares de inversión en las minas de cobre y oro de Oyu Tolgoi, en el sur del desierto del Gobi. Según las negociaciones previas, la inversión extranjera en el yacimiento sería mayoritaria, y Mongolia retendría sólo un 34 por ciento, que Elbegdorj aspira a elevar hasta un 50 por ciento. También la semana pasada algunas mineras canadienses con intereses en Mongolia hicieron público que estaban sufriendo suspensión de licencias por tres meses por parte del gobierno, como en el caso de Western Prospector Group Ltd, Khan Resources Inc., o Centerra Gold Inc. El "pequeño presidente" se propone atraer en los próximos cinco años una inversión extranjera de 25 mil millones de dólares de inversión minera para desarrollar el sector con políticas favorables a la transferencia de tecnología y a la protección medioambiental. Temas Asia China Comunismo Lee También Cuidado con la carta china De la ficción a la realidad, o de la realidad a la ficción Sheinbaum habla sobre la relación comercial entre México y China Huawei lanza el Mate 70, su primer "smartphone" con sistema operativo propio Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones