Miles de personas reclaman en Argentina

Buenos Aires.- El sector agropecuario argentino convocó hoy a miles de personas en un acto en Buenos Aires para reclamar al Senado que no vote este miércoles a favor de un proyecto gubernamental para convalidar los impuestos móviles a las exportaciones de granos.

El acto, al que según los organizadores acudieron 300.000 personas, cifra reducida a unas 225.000 por fuentes extraoficiales, fue convocado por las cuatro mayores patronales rurales del país.

Asistieron líderes políticos de la oposición y también militantes del gobernante Partido Justicialista enfrentados abiertamente con el gobierno de Cristina Fernández.

"No vinimos acá a presionar a nadie. No queremos condicionar la voluntad de ningún legislador. Simplemente solicitamos a los senadores que voten a conciencia. Un conflicto de esta magnitud no puede dirimirse en el estrecho marco de las fidelidades partidarias", dijo el titular de la Sociedad Rural, Luciano Miguens.

El dirigente reiteró que las retenciones a las exportaciones de soja, maíz, trigo y girasol impuestas por el Gobierno el 11 de marzo son "injustas, confiscatorias y anticonstitucionales" y "afectan la rentabilidad y la dignidad del hombre del campo".

El 17 de junio pasado la presidenta argentina, Cristina Fernández, envió al Parlamento un proyecto de ley para la ratificación de los impuestos a las exportaciones de granos, aprobado el pasado día 5 en la Cámara de Diputados y que será debatido este miércoles en el Senado, donde se espera una reñida votación.

El presidente de las Confederaciones Rurales Argentinas, Mario Llambías, dijo que "hay senadores que se van a jugar por el país, otros que están dudando, y quienes por una mal llamada disciplina partidaria juegan en contra los intereses del pueblo, pero lo peor es que hay legisladores que están siendo presionados por el gobierno para que cambien su voto".

El titular de la Federación Agraria de la provincia de Entre Ríos, Alfredo de Angeli, un icono de la protesta rural, dijo que los senadores tienen la "responsabilidad" este miércoles de "unir al pueblo y de poner en marcha la producción agropecuaria argentina".

"A los que están indecisos, les digo que acá está el pueblo apoyándolos y pidiéndoles que voten por nosotros", señaló.

De todas formas, los dirigentes no se animaron a pronosticar un triunfo en la votación en el Senado y aseguraron que, sea cual fuere el resultado, la lucha rural continuará en pie.

"Esto no termina mañana. Cualquiera sea el resultado de mañana, hay que convocar a un plan agropecuario nacional. Hemos tenido 120 días de lucha y estamos para estar más si nos toca hacerlo. Para atrás no vamos, ahora vamos para adelante", prometió De Angeli.

"Esto va a seguir. Ganemos o perdamos mañana, esta medida (de las retenciones) no va a poder continuar", coincidió el presidente de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi.

Todos los dirigentes rurales aprovecharon para defenderse de las acusaciones en su contra lanzadas por el ex presidente Néstor Kirchner, quien hoy encabezó otro acto, también multitudinario, a las puertas del edificio del Parlamento para respaldar la gestión de su esposa, cuya imagen positiva ha caído fuertemente en sus primeros siete meses de presidencia, según sondeos privados.

"El ex presidente quiere manejar el barco desde la sala de máquinas y va a estrellar el barco que es el país y no se lo vamos a permitir", dijo De Angeli.

Miguens dijo que no se puede culpar al campo de la inflación ni del enfriamiento de la economía ni asignarle "roles conspirativos que no tiene intención ni capacidad de ejecutar".

"Estamos en presencia de un modelo económico que apunta a la concentración y que constituye un capitalismo de amigos beneficiarios. De esta manera no se resuelve la pobreza ni tampoco se defiende la mesa de los argentinos. A unos nos sacan y a otros no les dan", señaló por su parte Buzzi.