Francia pide a UE rapidez contra fondos de extremistas

BRUSELAS, BÉLGICA (08/DIC/2015).- Francia instó a sus socios de la Unión Europea que aceleren los esfuerzos para cortar el financiamiento de grupos extremistas, casi un mes después de los atentados en París.

"Todos los países están bajo amenaza de terrorismo, y todos los países tienen que hacer lo necesario para combatir el financiamiento del terrorismo", dijo a la prensa el ministro galo de Finanzas, Michel Sapin.

Sapin y sus homólogos de la UE se reunían en Bruselas para debatir formas de seguir mejor las transferencias financieras, controlar las tarjetas bancarias de prepago, congelar activos y limitar movimientos de efectivo y metales preciosos.

La Comisión Europea establecerá un calendario para adoptar medidas clave, después de que el proceso cobrara una nueva urgencia tras los atentados del 13 de noviembre en los que murieron 130 personas.

Sin embargo, Sapin advirtió que "las fechas para adoptar estas medidas quedan muy lejos. Los terroristas están ahí, así que debemos actuar más deprisa".

Algunas de las medidas se anunciaron tras los ataques contra la revista satírica Charlie Hebdo y un supermercado kosher de París en enero, y de los disparos contra un debate sobre la libertad de expresión organizado en Copenhague al mes siguiente, pero ahora se están sumando más propuestas.

Francia quiere aumentar las competencias de los equipos de espionaje financiero que analizan las transacciones sospechosas, trabajar con Estados Unidos para compartir datos de "finanzas terroristas" y mejorar el sistema para congelar activos.

También pide controles más estrictos y una mayor transparencia en el uso de monedas virtuales o formas de dinero electrónico como tarjetas de prepago, que permiten enviar pequeñas cantidades de dinero.

París también pidió más controles de frontera en la transferencia de dinero en efectivo, oro, metales preciosos y tarjetas prepago y mercancía, ya que sólo se requiere una declaración de aduanas si el valor supera los 10 mil euros.

Las medidas incluirían una campaña contra el tráfico ilegal de bienes culturales, en medio del temor a que los extremistas vendan o hagan contrabando con objetos saqueados de yacimientos arqueológicos o museos.

El ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, dijo que las nuevas leyes no pueden aprobarse lo bastante pronto.

"Las necesitamos bastante rápido, y tenemos que intentar acelerar el proceso de implementación", dijo.