Ex dictador pide libertad condicional a justicia argentina

BUENOS AIRES, ARGENTINA (08/FEB/2012).- El dictador argentino Jorge Rafael Videla, quien está condenado a cadena perpetua por haber cometido crímenes de lesa humanidad, solicitó hoy libertad condicional, pese a que están en marcha otros juicios en su contra.

Videla, de 86 años, fue condenado en diciembre pasado a cadena perpetua por 700 casos de violaciones a los derechos humanos ocurridas durante el régimen militar que gobernó el país entre 1976 y 1983, aunque todavía hay una decena de causas en las que está involucrado.

Una de ellas es por la apropiación de 34 menores nacidos en las cárceles clandestinas operadas por los organismos represivos de la dictadura militar.

El abogado Alberto Rodríguez Varela, que representa a Videla, introdujo ante los tribunales un escrito en el que aseguró que su cliente ya lleva 20 años de prisión efectiva, lo que debería ser suficiente para otorgarle la libertad condicional.

Agregó que Videla ya fue juzgado por los crímenes de lesa humanidad en 1986, y que, por lo tanto, los nuevos procesos que se están debatiendo violarían el principio que indica que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito.

Rodríguez Varela consideró 'inimaginable' que un tribunal imparcial le niegue al represor la libertad condicional, 'ya que se trata de un hombre de 86 años, con una conducta irreprochable en la cárcel, según los reportes del Servicio Penitenciario Federal'.

Videla encabezó el golpe militar que el 24 de marzo de 1976 derrocó al gobierno de María Estela Martínez de Perón.

La dictadura terminó en 1983 con un saldo de 30 mil desaparecidos. Tres años más tarde se realizaron los históricos juicios a las juntas militares y la mayoría de los acusados, entre ellos Videla, fueron condenados a cadena perpetua.

En 1989, el gobierno del presidente Carlos Menem decretó una amnistía y los represores quedaron en libertad, aunque pocos años después Videla quedó sometido a prisión domiciliaria por el caso de la apropiación de bebés, único delito que no había sido juzgado en 1986.

El ex dictador permaneció en la comodidad de su casa hasta que en 2005 se derogaron definitivamente las leyes que les habían permitido la impunidad y en 2008 fue trasladado a una cárcel militar, en la que permanece desde entonces.