El rey Felipe de España preside celebración nacional

MADRID, ESPAÑA (12/OCT/2015).- El rey Felipe presidió el lunes un desfile militar para celebrar la fiesta nacional de España, mientras la alcaldesa de Barcelona se negó a participar alegando que la fecha es vergonzosa porque celebra el genocidio de los pueblos indígenas americanos durante la conquista española.

Unos 3 mil 400 soldados marcharon por el centro de Madrid mientras la aviación sobrevoló trazando en el cielo columnas de humo rojo y amarillo en representación de la bandera nacional.

La fiesta se conoce como el Día de la Hispanidad. Conmemora la llegada de Cristóbal Colón a América y es también el día de las fuerzas armadas de España.

Miles de personas se alinearon en la avenida Paseo de la Castellana para saludar el paso del monarca acompañado de la reina Letizia y las princesas Leonor y Sofía. En el desfile participaron soldados de los regimientos históricos.

En Barcelona, varios miles de personas aprovecharon la celebración para reunirse en una plaza céntrica y manifestar su oposición a la independencia catalana, dos semanas después que el gobierno de la región efectuó una votación para medir el apoyo a la secesión.

En esa votación, los partidos independentistas ganaron una mayoría de bancas en el Parlamento regional de Cataluña pero no se aseguraron más del 50% del voto popular en una elección en la que esperaban recibir un mandato inequívoco por la secesión.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, dijo que se negó a participar porque a su juicio la fecha no representa un día de orgullo para España sino de vergüenza. "Vergüenza para un estado que celebra el genocidio y encima efectúa un desfile militar que cuesta 800.000 euros", tuiteó Colau, refiriéndose a los pueblos indígenas que murieron como resultado de la conquista española de América.

En otro acto, unos 150 derechistas encendieron petardos, quemaron banderas regionales catalanas y flamearon las banderas españolas para expresar su antipatía hacia el movimiento independentista. La demostración concluyó pacíficamente.

También se llevaron a cabo celebraciones en otras ciudades como Pamplona y Zaragoza.