WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (25/ABR/2017).- Corea del Norte realizó ejercicios de artillería el martes, mientras que un submarino estadounidense equipado con misiles guiados llegó a Corea del Sur.En tanto, la Casa Blanca alista un informe extraordinario a los senadores sobre la creciente amenaza nuclear.Los temores de que Corea del Norte celebraría el 85to aniversario de la fundación de su ejército con una prueba nuclear o el lanzamiento de un misil balístico, resultaron infundados. Pero la impredecible nación comunista realizó un despliegue de su fuerza con los ejercicios que fungieron como recordatorio de la amenaza que representa detrás de la frontera con Corea del Sur, un aliado estadounidense.La zona de ejercicios militares en la ciudad de Wonsan, en la costa este, involucró entre 300 y 400 piezas de artillería, reportó la agencia noticiosa de Corea del Sur, Yonhap. Un funcionario del ministerio de Defensa de Seúl no pudo confirmar los detalles.La prensa oficial de Corea del Norte reportó la mañana del miércoles que el líder Kim Jong Un observó en persona los ejercicios militares, entre los que se reporta se incluyeron ataques con torpedos de submarino hacia falsos buques enemigos "mientras que los aviones de combate y bombarderos volaron a ras del mar para arrojar bombas a sus objetivos", destacó la Agencia de Noticias Korean Central.El presidente Donald Trump ha enviado más recursos militares a la región para mostrar su poderío, a la vez que depende de China para ejercer una presión económica en su aliado. El presidente de China, Xi Jinping, quien habló el lunes con Trump, exhortó tanto a Pyongyang como a Washington a que muestren prudencia.En Washington, altos funcionarios del gobierno de Trump darán el miércoles un informe al pleno del Senado. El acelerado paso de las pruebas de armas por parte de Corea del Norte en el último año, ha llevado a la autoritaria nación de Kim Jong Un a estar cerca de desarrollar un misil con capacidad nuclear que pueda llegar a Estados Unidos continental.El senador republicano Lindsey Graham expresó el martes su optimismo de que Trump no permitirá que Corea del Norte llegue a ese punto. Graham, experto en defensa, cenó con Trump la noche del lunes, y dijo que Corea del Norte no debe subestimar la determinación del presidente."Posiblemente estamos en una de las situaciones más desafiantes desde la crisis de los misiles cubanos", dijo el senador John McCain, otro republicano que cenó con Trump.