China en desacuerdo con declaraciones de Amnistía Internacional

BEIJING, CHINA.-El Gobierno chino afirmó el martes que "cualquiera que conozca China no estará de acuerdo con las informaciones de deterioro de los derechos humanos en China" publicadas el lunes en el último informe de Amnistía Internacional (AI).

Según dijo el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores, Liu Jianchao, AI "debe quitarse las gafas de miope que ha llevado durante tanto tiempo para poder ver a China de forma objetiva".

"El Gobierno chino ha tenido una actitud abierta para discutir sobre derechos humanos, pero a veces algunas partes no tienen en cuenta las mejoras de los derechos humanos en China y la atacan con con (supuestas) evidencias sin fundamento", manifestó la fuente oficial.

Liu reiteró que Pekín se opone a injerencia a sus asuntos internos utilizando los derechos humanos y remitió a las autoridades competentes (responsables de prensa del Comité Organizador de los JO de Pekín) si los periodistas que cubren la información olímpica se ven afectados por bloqueos de páginas de Internet.

El informe sobre la vigencia de los derechos humanos en China, AI acusó el lunes en Hong Kong a Pekín de dar una nueva vuelta de tuerca a la censura mediática, a las detenciones sin juicios y a la persecución de defensores de derechos humanos.

"Cuenta atrás para los Juegos- promesas rotas", el informe incidió en el empeoramiento de la situación de los derechos humanos en China desde abril de 2008, cuando se elaboró el anterior.

El estudio de AI se centra en la persecución de las autoridades de activistas de derechos humanos, las detenciones sin juicios, la censura a la prensa y la pena de muerte, "cuatro áreas relacionadas con los valores olímpicos", insiste en que el gobierno chino no ha cumplido con sus promesas de 2001.

En aras de mostrar una imagen de estabilidad y armonía al mundo las autoridades centrales "están limpiando Pekín" (de activistas de derechos humanos, agraviados del régimen) y no "permiten la 'libertad de prensa en el contexto de los Juegos como prometieron".

Para AI es primordial que tanto el Comité Olímpico Internacional (COI), como los líderes mundiales, incluidos aquellos que acudan a la inauguración de los JO pidan cuentas y muestren su preocupación por las violaciones de derechos humanos protagonizadas por China.

El silencio de las personalidades mundiales podría ser interpretado por China como un "apoyo tácito" a sus actos.

Sólo en la cuestión de la pena de muerte, indicaron los analistas de AI, parece haber un "avance positivo", ya que, si se tienen por "correctos" los datos de la Corte Suprema china -las cifras no se pueden contrastar porque el total de ejecuciones es un secreto de Estado-, este órgano habría reducido hasta un 15 por ciento el número de ejecuciones en la primera mitad de 2008.

AI expresó también su preocupación de que en la etapa posterior a los Juegos, "a menos que el Gobierno chino haga un esfuerzo" las violaciones a los derechos humanos continúen "cuando los focos de los medios de comunicación se hayan apagado".