HANGZHOU, CHINA (03/SEP/2016).- Las autoridades chinas han hecho un esfuerzo especial en la cumbre del G20 que comienza mañana en la ciudad de Hangzhou, para la que se han superado a sí mismas en inversión y preparativos. Beijing busca que esta cita, probablemente la más importante a nivel internacional que ha acogido jamás China, consolide y muestre al mundo la cara más positiva de su ascenso a la primera línea de las potencias del mundo.El agravamiento del conflicto sirio en las últimas semanas; el aumento de las tensiones en Ucrania, la situación en Turquía y, en el lado económico, la búsqueda de un plan de revitalización a nivel global, dominarán las sesiones y las múltiples reuniones bilaterales que tendrán lugar al margen de la cumbre. Hangzhou, además, será el escenario donde debuten en el nivel de las grandes cumbres el nuevo presidente brasileño, Michel Temer, y la primera ministra británica, Theresa May.Si bien Hangzhou es una de las más bellas ciudades de China, el Gobierno se ha esmerado un poco más con una reforma urbanística de la ciudad, aunque se desconoce la inversión a dicho proyecto; pero también ha hecho una limpia a tal extremo que un cuarto de sus habitantes ha tenido que mudarse temporalmente (algunas viviendas incluso fueron derrumbadas), las fábricas están paradas (los empleadores dieron vacaciones obligatorias a los obreros) para garantizar un cielo azul y los comercios fueron cerrados a orillas del lago del Oeste.Para evitar las manifestaciones que suelen acompañar a las cumbres del G20, las autoridades alejaron a decenas de militantes, según Huang Qi, director de una página web que hace recuentos de las manifestaciones del país: “Conozco más de 100 casos de personas que fueron detenidas”.EL DATO Participa México en la cumbreEl Presidente Enrique Peña Nieto viajó ayer a China para participar en la cumbre; lo acompañan la canciller de Relaciones Exteriores, el secretario de Economía, y la primera dama, entre otros.