Ataque a consejo provincial de Iraq deja 21 muertos

BAGDAD, IRAQ (29/MAR/2011).- Milicianos con cinturones explosivos y vestidos con uniformes militares invadieron el martes el consejo de una provincia norteña de Iraq, en un intento de tomar rehenes que dejó al menos 21 muertos, informaron las autoridades.

Están desaparecidos tres legisladores que se encontraban en el edificio del consejo provincial de Salahuddin, en Tikrit, cuando los milicianos tomaron el edificio, dijo el gobernador Ahmed Abdalá. Dijo que no respondían a sus teléfonos móviles y se desconocía su paradero, indicio de que podrían retenerlos como rehenes.

"Hemos perdido el contacto con tres miembros del consejo provincial que se hallaban en el edificio cuando se produjo el ataque", dijo Abdalá en entrevista telefónica desde Amman, Jordania, donde se mantenía al tanto vía teléfono móvil.

Describió un tiroteo entre por lo menos ocho hombres armados, que se habían apoderado del segundo piso del consejo y las fuerzas de seguridad que rodearon el edificio. Añadió que los milicianos lanzaban granadas a las fuerzas iraquíes.

El asesor de prensa provincial Mohammed al-Asi dijo que el asedio, que aún continuaba, había dejado 21 muertos y 65 heridos. Uno de los muertos era el periodista Sabá al-Bazi, corresponsal de los canales Al-Arabiya y CNN, según las dos empresas.

Un agente de los servicios de espionaje en Bagdad dijo que los milicianos tenían algunos rehenes, pero que no sabía cuántos. Atribuyó el ataque a Al-Qaeda en Iraq.

"El objetivo de los atacantes aparentemente era tomar rehenes", dijo el vocero del gobierno provincial, Ali al-Salé. Algunos funcionarios pudieron escapar, añadió.

Tikrit, 130 kilómetros al norte de Bagdad, es la población natal de Saddam Hussein. Las autoridades dijeron que los atacantes hicieron explotar un automóvil frente a la sede del consejo como maniobra de distracción antes de inicial el ataque.

Vestidos con uniformes militares ''uno de ellos con insignias de alto grado'' se identificaron como soldados en el retén de seguridad frente al edificio, pero abrieron fuego cuando les dijeron que iban a catearlos.