Anticipan dimisión de la canciller francesa

PARÍS, FRANCIA (25/FEB/2011).- La canciller francesa, Michele Alliot-Marie, dimitirá previsiblemente durante el fin de semana tras una serie de metidas de pata sobre Túnez que han manchado al Gobierno del presidente Nicolas Sarkozy, dijeron el viernes fuentes oficiales.

El ministro de Defensa Alain Juppe, un veterano político conservador que fue primer ministro y canciller en la década de 1990, la sustituirá, añadieron las fuentes.

El cambio llega cuando Francia está intentando bregar con la revuelta prodemocracia que se extiende por países del norte de África, varios de los cuales son ex colonias galas. La élite francesa ha tenido estrechos lazos con los gobernantes autoritarios.

"Esto no puede seguir", dijo una fuente gubernamental sobre el furor desatado cuando se supo que Alliot-Marie fue de vacaciones a Túnez cuando estallaron allí las protestas y aceptó un avión privado cedido por un empresario tunecino cercano al derrocado presidente Zine al-Abidine Ben Ali.

"Tiene que irse, y para que sea digno, tiene que dimitir ella", dijo la fuente.

El Gobierno apoyó en un primer momento a Alliot-Marie frente al clamor mediático y las peticiones de dimisión de la oposición, pero los sondeos mostraron que el caso estaba dañando los ya malparados índices de aprobación de Sarkozy.

"La marcha de Alliot-Marie es un hecho", dijo una segunda fuente. "Juppe se ve abocado a asumir el cargo ante las presiones del presidente", añadió.

La oficina de Sarkozy declinó comentar la información. Alliot-Marie dijo a una emisora francesa que no estaba "interesada en rumores". El diario Le Monde citó otras fuentes que dijeron que se iría la semana próxima.

Caída en desgracia 

Su caída en desgracia ha sido una sorpresa tras una sólida carrera política durante la cual se convirtió en la primera mujer en dirigir los ministros de Defensa e Interior.

Designada como canciller en una reforma del gabinete en noviembre, Alliot-Marie fue criticada por reaccionar con lentitud a la revuelta tunecina y por sugerir días antes de la caída de Ben Ali que Francia podría asesorar a Túnez para controlar a la multitud.

También fue objeto de críticas cuando, en mitad de la crisis, se fue de vacaciones a Túnez con sus padres y su pareja, también ministro del Gobierno. El grupo usó un jet privado del empresario Aziz Miled y sus padres compraron una compañía inmobiliaria a un ayudante de Ben Ali.

La oposición y los analistas de medios la acusaron de mentir con sus explicaciones, y los sondeos mostraron que la mayoría de los votantes querían que dimitiera.

Los analistas la culpan ahora de la nueva caída en la valoración de Sarkozy. Las encuestas muestran que la mayoría de la población tiene una opinión negativa del presidente y no quiere que se presente a la reelección en 2012.