Afectarían a latinos recortes a programa de asistencia médica en Estados Unidos

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (13/OCT/2011).- Los recortes que analiza el Congreso de Estados Unidos a programas asistenciales, como el Medicaid de atención médica para personas de bajos recursos, afectaría particularmente a los latinos y afroestadunidenses, según un informe divulgado hoy.  

Millones de personas de ambos grupos minoritarios con condiciones serias de salud dependen del Medicaid para su tratamiento, medicamentos y visitas médicas, según el reporte del Consejo Nacional de La Raza (NCLR) y las asociaciones estadunidenses de la Diabetes y el Pulmón.  

El informe lo elaboraron además el Instituto de Políticas de Salud, la Asociación Nacional para el Avance de Personas de Color (NAACP), la Asociación Médica Nacional, el Instituto de Políticas de la Liga Nacional Urbana y Families USA.  

Un denominado 'súper-comité' bicameral del Congreso analiza recortes a diferentes programas con el fin de reducir el déficit del gobierno federal.  

Uno de cada cuatro latinos con cáncer o diabetes cuenta con Medicaid, y casi dos de cada cinco latinos con enfermedades crónicas del pulmón reciben cobertura de ese programa, de acuerdo con el informe.  

Señaló que casi la cuarta parte de la comunidad latina que recibe tratamientos para condiciones cardiacas y derrames obtiene su tratamiento mediante el Medicaid.  

El programa ayuda a casi la mitad de todos los niños latinos y afroestadunidenses a que tengan un inicio saludable en sus vidas y ayuda también a las personas de edad avanzada y con discapacidades que necesitan cuidados a largo plazo.  

El informe indicó que los recortes de fondos federales al Medicaid no reducen los costos médicos, sino que los transfiere a los estados, las familias, los hospitales y las personas que obtienen seguro de salud en el mercado privado.  

Señaló que en algunos casos la reducción de ayuda para costear tratamientos médicos puede incrementar los costos del sistema de salud a largo plazo.  

Los latinos y afroestadunidenses tienen más probabilidades que los blancos de sufrir de enfermedades crónicas como diabetes, asma y ciertos tipos de cáncer.  

En ambos grupos minoritarios, uno de cada cuatro depende del Medicaid para la atención médica, en tanto que entre los blancos la cifra es de uno de cada ocho.