Más de 40 millones de tailandeses están llamados a acudir a las urnas en un clima de tensión debido a la violencia ocurrida en torno a las protestas en las que al menos diez personas han muerto y más de 500 han resultado heridas desde el pasado noviembre.La primera ministra acudió al colegio electoral de su distrito en la capital a ejercer su derecho en medio de fuertes medidas de seguridad, con controles de policías y soldados.Decenas de manifestantes antigubernamentales bloquearon a primera hora un colegio electoral en otro distrito Bangkok y se han concentrado frente a otros lugares habilitados para ejercer el voto.Ayer, al menos seis personas resultaron heridas, incluidos dos periodistas, en un enfrentamiento entre manifestantes rivales en el que hubo un tiroteo durante la jornada de reflexión en las oficinas de distrito de Laksi, en la capital.El choque se produjo cuando los manifestantes que desde el viernes sitian la oficina, para evitar el reparto de papeletas y urnas electorales, chocaron con un grupo de "camisas rojas", como se hacen llamar los seguidores del Gobierno.Los funcionarios de la Comisión Electoral decidieron cancelar la votación en este distrito, que deberá aplazarse para otra fecha. En la provincia sureña de Pattani, varios líderes locales han amenazado con enfrentarse con los manifestantes que han impedido el reparto de papeletas y urnas en numerosas circunscripciones de la región.El domingo pasado, los antigubernamentales impidieron la votación anticipada en la mayoría de los colegios electorales en la capital y de algunos en otras provincias, donde intimidaron a quienes querían ejercer su derecho al voto.La campaña electoral se ha limitado a la presencia de algunos carteles de los partidos, con la excepción del Partido Demócrata, la principal formación de la oposición, que decidió boicotear los comicios y no presentar candidatos.La Comisión Electoral afirmó que el recuento se alargará hasta que organice las votaciones parciales en los próximos meses para los que no hayan podido depositar su papeleta y en las 28 circunscripciones del sur donde los manifestantes impidieron el registro de candidatos.Unos 200.000 policías han sido desplegados en todo el país para garantizar el desarrollo pacífico de la jornada electoral, de los cuales unos 10.000 lo harán en Bangkok, apoyados por unos 7.000 soldados.Los antigubernamentales exigen que antes de las elecciones se forme un consejo no electo que sustituya al Gobierno y aborde una reforma del sistema político que consideran corrupto y al servicio de los intereses del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, hermano de Yingluck.Thaksin, depuesto en 2006 por un golpe militar, ha ganado directamente o a través de partidos afines todas las elecciones generales desde 2001 gracias al apoyo de la población rural del norte y noreste del país que se benefició de sus políticas sociales.