Por Emilio Fernando Alonso El pasado sábado, en el marco de los festejos por el 50 Aniversario del Futbol Club Providencia, su directiva, presidida actualmente por Adrián Padilla, y contando con el apoyo de los miembros del tradicional club tapatío, como Federico Cuevas, Alfonso “la Canica” Martínez, Samuel Rodríguez, Rafael “Chartchai” Sandoval, el Dr. Rafael Ortega “arriba Atotonilco”, Eduardo Manuel Calderón y su señora Karla, Don Gastón González, padre de Mauricio y Jorge Gastón González Alcerreca, organizaron un evento emotivo e inolvidable para todos los que estuvimos invitados a participar en ello. Fue muy emocionante saludar y convivir con tantos amigos queridos, ex futbolistas profesionales que armaron un equipo para enfrentar a los socios del Providencia, y que terminaron empatados 2-2 con buenas jugadas, goles y atajadas de los porteros, Alfonso Martínez por los de casa y Refugio (Cuco De La Cruz) por los visitantes. Se dieron cita también Omar Arellano Nuño, Raúl “Willy” Gómez, Efraín Flores, Juan Manuel Luna, Víctor Rodríguez, Jorge Dávalos, Fernando Ibarra Rivas, Rodo García, Héctor Flores, Ignacio “Cuate” Calderón, Sergio Lugo Barrón, Fernando Quirarte, Héctor De la Torre Menchaca, Gabriel Gerardo Gómez “el Schumacher”, Humberto “el Geo” Romero, Juan Carlos “el Pitayo” Vázquez, Gilberto “el viejo Adame” y Martín González. También fue grato saludar a mis colegas y amigos Luis Fernando Loza Lepe y Adán Vega Barajas. El árbitro de la “cáscara” fue Silverio Gómez, quien fuera uno de los ases como árbitro auxiliar en su tiempo. Pasamos un gran día y los que desde fuera pudimos platicar historias y anécdotas, de los que estaban dentro, como aquellas del férreo zaguero central de los Leones Negros, Víctor Rodríguez, quién cuando atropellaba a sus rivales con el ímpetu y fuerza que le caracterizaron, recibía una reprimenda del “capi” Dávalos, quién decía al adolorido rival, “discúlpalo, es que no sabe jugar”, o aquella otra en que cuando a Humberto Romero en un entrenamiento, le pidieron hacer un ejercicio donde había que encarar y después disparar al arco, él contestó: “no… si hay que disparar, yo mejor me voy”, acrecentando su bien ganada fama de ahorrativo. Antes del partido, hubo una entrega de reconocimientos por su trayectoria en el ámbito del periodismo deportivo a Jaime García Elías, Juan Pablo Romero y un servidor. Ahí mismo, se recordó contando con la presencia de sus familiares, a socios del Providencia que representaron al club en las canchas y como bien lo apuntó Alfonso Martínez, conductor del acto, hoy lo hacen en la cancha celestial. Asimismo, presentaron con jóvenes integrantes de las diferentes categorías de los equipos representativos del club los nuevos uniformes, donde predomina el tradicional color morado, muy bonito por cierto. Después, una deliciosa comida e imperdible charla y convivencia que se prolongó hasta la madrugada del domingo. Lo dicho, un día inolvidable rodeados de grandes amigos y socios del Providencia, amenazamos con volver pues momentos y días así quedan imborrables en la vida y será lo único que nos llevemos, cuando Dios nos lleve a narrar en la cancha celestial. ¡Felicidades Providencia! Gracias a todos. Y por fin, mañana se inaugura con el Brasil-Croacia la vigésima edición del Campeonato Mundial de futbol, y por fin también, el técnico nacional dio a conocer que Guillermo Ochoa será el portero titular cuando México el viernes 13, abra ante Camerún su participación mundialista. 64 partidos se vienen durante un mes, ojalá sean de alto nivel; yo los espero en el Chile-Australia el próximo viernes a las 17:00 horas en TDW radio.
