GUADALAJARA, JALISCO (10/MARZO/17).- Aunque la rudeza y la maldad suelen ser características en Willem Dafoe por cuestiones personales, el actor que ha sido nominado dos veces al Oscar, mostró en Guadalajara que lejos de la cámaras y sets de filmación es una persona accesible dispuesta a escuchar y ayudar a los nuevos talentos. Siendo uno de los principales invitados de honor de la edición 32 del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), Willem Dafoe se reunió con jóvenes talentos que, tras escuchar un poco sobre las diversas personificaciones y papeles que han consagrado al intérprete estadounidense, lograron hacerse escuchar exponiendo sus dudas y halagos al actor que tomó fama gracias a películas como "La última tentación de Cristo" de Martin Scorsese. A mediodía, Willen Dafoe llegó al Laboratorio de Artes Variedades (LARVA) de la ciudad para charlar sobre su experiencia en la industria de Hollywood, el proceso que vive en cada uno de sus personajes para lograr interpretaciones memorables, el cómo lidiar con directores, el ser uno de los actores en participar en el inicio de la oleada de filmes de súper héroes, por ejemplo. La charla amenizada por el crítico Gonzalo Lira dio paso para que Dafoe hiciera hincapié en que no toda la información que se encuentra sobre su vida personal y profesional en portales como Wikipedia son verdaderos por lo que prefirió prestar el micrófono a los asistentes, principalmente jóvenes directores, productores o actores, que cuestionaron al entonces "Duende verde" de la saga de Spider-Man de 2002-2007, cómo se logra una buena actuación y cuáles son las características que más le atrapan de un director. Dafoe señaló que trabajar con Martin Scorsese ha sido uno de sus trabajos más emblemáticos no solo por la polémica desatada ante el contenido planteado por el director en temas religiosos, sino porque el filme 1988 le permitió adentrarse a una nueva forma de plantear personajes a través de investigación y nutrirse de diversos criterios para defender el argumento de sus interpretaciones o el mensaje de la película. Otro tema planteado por Dafoe fue la necesidad de aprender a fingir para brindar mayor realismo a los personajes, incluso, alentó a los actores a no sentirse mal por imitar el trabajo de alguien más al considerar que es una forma de aprendizaje que da como resultado un estilo propio.
