Viajará 'Tierra madre' a festival de España y luego a EUA

MORELIA, MICHOACÁN (18/OCT/2010).-  Para Aideé González, nacida en Los Mochis, Sinaloa, y radicada en Tijuana, no es motivo de verguenza mostrar su pasado a través del filme 'Tierra madre', exhibido en la octava edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).  

Tras su participación aquí, la película viajará a un festival en Barcelona, España, y luego al Long Stars de Texas, Estados Unidos.  

El documental ha sido reconocido con la presea Reportaje en el Festival Internacional de Cine de Williamsburg, el Premio del Jurado a la Mejor Película en el Cinesul Iberoamericano; una mención en el encuentro Cine de Nueva Jersey y el galardón de Plata a la Excelencia Lei en el Festival de Cine de Honolulú.  

La película narra la historia de 'Rosalba', una mujer que radica en Tecate, Baja California, como parte del atractivo visual de un table dance.  

Por otro lado, 'Rosalba' se desvive por brindar amor a sus hijos, por protegerlos y labrarles un futuro, sin embargo, a su destino llegará otra mujer con la que entablará una relación homosexual que transformará su mundo.  

En entrevista, ante la pregunta expresa ¿de dónde sacó fuerza para exhibir su pasado en la pantalla grande? y el hecho de que todo mundo supiera de ella, González dijo que radicó en el ánimo de mostrar el otro lado de la moneda de un ser humano que se abrió pasó contra la adversidad.  

El filme forma parte de la sección oficial Largometraje Mexicano del FICM y hasta el momento ha sido bien recibida por el público, al grado de que según Aideé González en la función del domingo en la noche hubo personas que le pidieron les autografiara libros y hasta un balón de futbol.  

'Hay que mostrar la fortaleza de las personas, el lado humano, el de la superación personal y también la otra Tijuana, la de la otra cara no decadente que todo mundo ve en la televisión y en los diarios', dijo.  

González evocó aquellos tiempos, cuando a los 19 años decidió irse del hogar y dejar a sus padres para independizarse y vivir su propia vida sin ataduras, 'con decirte que a esa edad no había entrado a una disco, no conocía la vida nocturna', comentó.  

De esa manera ingresó a ese submundo, en el que el cuerpo es el atractivo del 'taiboldance', en donde hay que ganarse los dólares mostrando un rostro de alegría, ser sexy y hasta soportar cualquier individuo, desde clase alta, media y estratos bajos que piensan que por un puñado de billetes son dueños de esas mujeres.  

La sinaloense comentó que fueron 10 años de intensas jornadas nocturnas, en el tubo, sufriendo desprecios y acoso, pero también de un disfrute personal, 'no puedo negar que me gustaba la buena vida. Me ganaba muchos dólares, que me encantaba ir a gastar a las playas con mis amigas'.  

Hoy, alejada de la vida licenciosa, fuera del anonimato y a punto de alcanzar la fama, decidió invertir dos mil dólares para asociarse con otras personas y filmar su pasado.  

Al preguntarle cómo reaccionó su familia al enterarse de que ella era una teibolera, dijo que fue impactante, pues su madre se enteró, a través de un periódico de Mexicali, que publicó unas fotografías suyas revelando a lo que se dedicaba.  

'Mi madre estaba enojadísima. Me armó todo un show', dijo González al añadir: 'Pero como yo había tenido un carácter sumamente fuerte enfrente la responsabilidad'.  

Ahora, agregó, 'recordamos todo eso, pero ella sabe que he sido una buena madre, que no soy mala persona, y que siempre he tratado de sobrevivir sin meterme en problemas de los que tenga que arrepentirme'.  

'Fueron 10 días de intensa actividad en toda Baja California, principalmente en los antros de Tijuana, que conozco como la palma de mi mano', acotó.  

'Tierra madre' fue filmada en blanco y negro, sin embargo, en lugar de ser una limitante ha significado una puerta para mostrar de manera más cruda el relato dirigido por Dylan Verrechia, cineasta de origen francés.