Vanessa Bauche, con alma de cabaret

GUADALAJARA, JALISCO (17/OCT/2011).- El teatro la vio nacer, probó las mieles de la televisión y en el cine encontró un medio de expresión que le dio peso a su nombre, a la Vanessa Bauche que no se conforma con la actuación y que este jueves viene a Guadalajara a mostrar todas sus armas artísticas juntas, poco vistas en su carrera.

Juana’s Soul o La insignificancia de llamarse Juana es la puesta en escena desarrollada hace dos años por la propia Bauche, donde incursiona en el género cabaret del que ha quedado encantada por el encuentro que tiene a solas con el público, al que busca sacudir y llamar a la reflexión de distintos temas que atañen a la raza humana.

En el espectáculo, un monólogo tragicómico-musical de una hora 10 minutos de duración, la intérprete cuenta la historia de una mujer que dice que tiene la identidad perdida porque la extravió al romperse un espejo; se vio en tantos pedacitos que no supo cuál de todas las Juanas era ella.

“Es una metáfora de cuántas mujeres caben en una sola, pero sobre todo habla de la necesidad profunda que tienen todos los seres humanos y sobre todo los mexicanos, las mexicanas en este clima fuerte de inseguridad, de la necesidad del sentido de pertenencia, de encontrar nuestro lugar dentro de esta sociedad”, explica la autora y protagonista de la obra que tendrá una función este jueves a las 21:00 horas en el café 1er piso.

El montaje es, además, el renacer de Bauche como cantante, pues a lo largo de la tragicomedia, la actriz incluye cinco temas latinos a los que da voz, y a uno también le dio letra, por lo que se convierte en el proyecto más completo que haya realizado en sus ya 25 años de carrera artística y del que se siente más orgullosa.

“Esta hija mía que se llama Juana salió muy bien dotada porque es como la tesis de todo lo que soy, de mis luchas, de mis búsquedas de mis participaciones. Juana resume todos mis caminos llevados hacia una resolución luminosa digamos, es lo más completo que he hecho tanto por el aspecto actoral hasta en la parte musical y de autoría, entonces es el proyecto que me tiene más contenta”, comparte del otro lado del teléfono en entrevista.

A cinco años de mantenerse al margen del cine, Vanessa planea un regreso sorpresivo, al mismo tiempo que prepara su proyecto musical como solista, obras teatrales, cortometrajes y la celebración en la capital de su cuarto de siglo en la escena actoral. Sin prisa pero sin pausa, Vanessa Bauche mantiene la moneda en el aire, explorando proyectos que le permitan encontrarse con ella misma.

— En “Juana’s Soul” abordas temas muy humanos, muy reflexivos que comúnmente se ven en este tipo de espectáculos, porque es una obra arriesgada. ¿Cómo la ha recibido la gente?

— Afortunadamente muy bien porque como es muy divertido, muy dinámico, una vez que arranca se vuelve una montaña rusa de emociones que te llevan de la risa al llanto, a la música, otra vez a reír a llorar, a pensar, entonces no hay tiempo para aburrirse, es un espectáculo que se va como agua, se va volviendo cada vez más vertiginoso y lo que es muy bonito es que a diferencia del teatro tradicional, donde hay una cuarta pared y prácticamente el público no existe. En el teatro cabaret la dinámica es a la inversa, el público es parte también, cada noche es una función diferente porque no sabes en qué momento va a intervenir la gente, dónde se van a reír, entonces eso te hace estar muy alerta y muy de la mano con el público.

— Te vas a enfocar de lleno en la música. ¿Qué es lo que quieres plasmar en este nuevo material?

— Ahorita estamos empezando por buscar el color de todos los sonidos por los que quiero explorar, que serán las bases de raíces afrolatinas, un poquito de bossatón, espero mezclar el bossa nova con el reggaetón, con una cosa más fina un poquito más hip-hop, más funk, y obviamente con esto de rumba y también lo que viene de Oriente, que tiene que ver con raíces negras, africanas, porque en el fondo las raíces de todas estas músicas vienen de África, entonces vamos a buscar dentro de lo latino cómo podemos mezclar colores que nos den un tono especial y sabroso que nos identifique, pero que también sea universal.

— De todas estas áreas en que te desenvuelves ¿dónde te sientes más cómoda?

— Mi columna vertebral es el teatro, mi formación es teatral, sin el teatro no creo que haya actor, el teatro te limpia de todos los vicios que te puede dar la televisión o el cine, que es menos completo, porque trabajas para la cámara, entonces el teatro te obliga a trabajar con todo el cuerpo, tienes que tener una especie de condición de atleta, emocional y físicamente para poder transmitir todo desde un escenario teatral. El cine es mi elemento, es el que me ha dado todo reconocimiento tanto nacional como internacional y  lo extraño mucho; los demás medios de comunicación te brindan la oportunidad de crecer en otros aspectos, pero la música ahorita me tiene muy ilusionada porque creo que es mi lengua paterna y me la debía de hace mucho tiempo.

— ¿Cómo se siente Vanessa Bauche en este momento de su carrera donde experimenta en otros terrenos?

— Me siento en un momento de plenitud muy importante en mi vida en todos los aspectos, como mujer, como creadora artística, como promotora cultural, incluso ahorita estoy incursionando en el periodismo, desde hace tres meses en un periódico digital (www.sinembargo.mx) y estoy ahí como videocolumnista, entonces estoy probando facetas nuevas que me tienen muy contenta y que me están obligando a crecer como persona, pero sobre todo creo que siento que me conozco y me amo de una manera mucho más plena que antes, es decir, ahora me siento mucho más libre y en un momento de más sabiduría y mucha paz, de mucha más claridad, me siento muy contenta.

— Con todas estas incursiones artísticas y hasta periodísticas ¿cuál es el mensaje que quieres transmitir?

— Que todos somos una misma cosa, que todos somos una misma raza, que es la humana. De todas las diferencias que existen dentro de nosotros como seres humanos hay necesidades básicas, las mismas en cualquier parte del mundo, que tienen que ver con el amor, con la aceptación, con el autoconocimiento, con el progreso tanto individual como hacia  afuera socialmente hablando. Nuestro tejido social está muy lastimado, muy deteriorado y necesita urgentemente reconocerse en el reflejo de los otros, lo que le pasa a uno le pasa a todos, toda mi trayectoria tiene que ver con eso, con el desarrollo humano, social, para actuar como una sociedad madura.

PARA SABER
Admira el espíritu de los atletas

Al preguntarle a Vanessa cuál es su deporte favorito, sobre todo ahora que vendrá a la capital del deporte panamericano, la actriz no duda en responder: “El atletismo en general, los atletas merecen todo mi respeto porque es una vida de sacrificio, terminan alrededor de los 30 años, toda una vida dedicada a una disciplina férrea. La natación me encanta, el ciclismo, pero no soy tan fan, qué bueno que nos va a tocar coincidir”.

Juana’s Soul / Jueves 20 de octubre, 20:00 horas / 1er Piso (Pedro Moreno 947, esquina Escorza) / Entrada 200 pesos