Vamos al Cine

En la ruta del éxito como está, Penélope Cruz no disminuye su empeño de ganar fama y fortuna. El género en que incursionará durante 2010 ronda por la mente y se conoce hasta hoy con el título Melancolía.

Los resultados publicitarios tras su nominación al Oscar de la Academia Cinematográfica de Hollywood, por su actuación en Nine, no son ajenos al proyecto, más bien y se ven obvios.
De concretarse las negociaciones en Melancolía, la actriz española será dirigida por el cineasta danés Lars Von Trier y la trama explotará la predicción creada en torno a las posibilidades destructoras para 2012.

La atracción sobre fenómenos sobrenaturales abre expectativas en la pantalla, con efectos ópticos apocalípticos sobre nuestro planeta. Verdad o mito, la película puede llenar de terror a espectadores y de utilidades a los productores.

Por su parte, Lars Von Trier no es un improvisado en la temática, ya se le vio en el desarrollo de  la discutida cinta Anticristo. Sin embargo, el atractivo de taquilla se prevé sobre Penélope, quien obtenga o no el Oscar es garantía.

La revisión de la cartelera pone en relieve el interés por cintas con dosis excelentes de aplicación técnica en imagen y sonido, que ahora el cine europeo comienza a experimentar. De esta forma Dinamarca y Reino Unidos rompen con paradigmas de carácter humano como había sido tradicional.
La imposición de temores es atracción segura en cualquier empeño y el cine presta su capacidad con mezcla de diversión como parte de la cultura contemporánea. Un año dista para su estreno y ya es noticia. Aún no se ha iniciado la producción y la maquinaria publicitaria derrumba fronteras en su provocación, sustentada en la personalidad de la actriz y el drama que envuelve al mundo. El año 2012 está relativamente cercano para influir en el ánimo de la población que vive y en el menor de los casos ve tragedias naturales con mayor frecuencia y capacidad destructora.

Dios nos guarde de la discordia.

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