Triunfa en Colombia Edith González, estrella que rompe fronteras

BOGOTÁ, COLOMBIA.- Está satisfecha, se le ve en el rostro. Edith González dejó una cómoda posición como estrella de telenovelas en México para arrancar una nueva aventura, lejos de casa. Y es que cuando tuvo en sus manos el guión de Doña Bárbara, escrito por Valentina Párraga sobre el original de Rómulo Gallegos, sabía que tenía ante sí su mejor oportunidad para salir del país con un proyecto de calidad.

Ahora, afincada en Bogotá, Colombia, González no duda en afirmar que ha valido la pena sacrificar su exclusividad por nuevas metas personales. “La calidad de la trama. Ese fue uno de los motivos por lo que acepte trabajar fuera de mi casa, Televisa”.

Pero el haber trabajado lejos no quiere decir que no se supiera de ella. Doña Bárbara se puede ver en México y Edith quiere sentirse arropada nuevamente por el favor del público. “De verdad espero que le den todo su apoyo, así como se lo dieron a Victoria, aunque nos deja un gran paquete, pues se que es muy vista en México”.

En el país de Sudamérica, la rubia actriz ha constatado el amor que los colombianos tienen por histriones mexicanos. tal es el caso de Victoria Ruffo y Arturo Peniche, quienes triunfaron con la mencionada Victoria.

Cambia una “barbaridad”
Edith González tiene en Doña Bárbara un reto desde el armado del personaje. Los matices del personaje cambian con peculiar violencia a través de la trama. “Manejo una dualidad, pues primero soy muy tierna, dulce y cándida, pero después del asesinato a mi padre y novio, así como sufrir una violación, me convierto en una mujer amargada”.

Edith destacó que su personaje debía de tener matices, pues como le robaban su inocencia y no tuvo niñez, se tenía que reír como una niña, “Bárbara tiene una gran personalidad, pues vive en un mundo machista, en un llano donde sólo hay hombres, algunos de ellos luchan como guerreros, pero cinco hombres le arruinan la vida”.

La estrella de novelas mexicanas como Mujer de madera y Mundo de fieras, expreso que nuestro país “siempre ha sido punta de lanza en telenovelas, pero últimas las historias en horario estelar en México son manufactura colombiana”. Además, deja la puerta abierta para volver a trabajar en el país cafetalero.

La clave del éxito de las tramas realizadas en Colombia las explica Edith con una sencilla ecuación: “Es porque son dramas escritos con coraje y emoción; en algunos momentos llegan a ser viscerales, pero las historias son exportadas a varias partes del mundo”, demostrando así la universalidad del guión.

Estrella lejana
Una ventaja para Edith González fue llegar como “novata” a la televisión colombiana, pero también con una reputación ganada en las pantallas mexicanas. “Primero era la niña nueva de la escuela, nadie me conocía sólo al vicepresidente de Telemundo, pero son muy cálidos, tengo tantas anécdotas que contar”. Y una que siempre recuerda son los brazos abiertos con que el público de ese país la trató desde un principio.

Entre las anécdotas que recuerda con una sonrisa, tiene que ver cuando recibió a su hija Constanza y le dijeron “mona”: “En Colombia en vez de decir rubia o güera, dicen ‘mona’, pues como tengo teñido el cabello de castaño, nunca se imaginaban que yo era rubia”.
Otra cosa que le queda de su personaje es la actitud “campirana” que ha adoptado. Y es que ahora Edith aprendió a montar, usar armas, espantar mosquitos y valerse por si sola en el llano colombiano.

Drama llanero
La telenovela Doña Bárbara, cuenta la historia de Barbarita Guaimarán, una joven que creció en medio de la pobreza y la desdicha. De su educación se encargó su padre, capitán de un viejo barco transportador de víveres, y Eustaquia, la india que la cuida tras la muerte de su madre.

Ella conoce a Asdrúbal, un joven aventurero, educado y es contratado por su padre para encabezar parte de la tripulación que lidera. Con el tiempo los dos jóvenes se enamoran hasta el día en que sus destinos tienen un encuentro con la muerte.

Doña Bárbara es protagonizada además por Christian Meier y Génesis Rodríguez, hija de José Luis Rodríguez “El Puma”.