Tom Cruise se embarca en una Misión: Imposible

GUADALAJARA, JALISCO (21/DIC/2011).- Hace una década el nombre de Tom Cruise era sinónimo de éxito dentro de las producciones estadounidenses y los estudios prácticamente se lo peleaban para que fuera la figura en sus cintas. Pero el tiempo no pasa en balde y un par de fracasos en la taquilla hicieron que muchos se cuestionaran si la carrera del protagonista de Nacido el 4 de julio y Días de trueno no estaría en el ocaso. El único que jamás lo dudó fue el propio Tom Cruise, quien regresa a la pantalla grande con la cuarta parte de Misión: Imposible, cinta que ha cosechado buenas opiniones entre la crítica, que se ha caracterizado por ser particularmente dura con el actor.

La trama sigue las andanzas de Ethan Hunt (Cruise), uno de los agentes más destacados de la IMF (Fuerza Misión Imposible, por sus siglas en inglés), que se ha visto implicado en un complot terrorista donde el propio Ethan juega un papel central, por lo que el presidente decide suprimirla activando el llamado “Protocolo fantasma”.

Dispuesto a limpiar su nombre y encontrar a los verdaderos culpables, Hunt se embarca en una misión literalmente imposible, donde deberá atravesar países como Rusia, Canadá y República Checa, entre otros, en los que encontrará pistas sobre quien tendió la trampa y un gigantesco complot internacional que incluye un ataque nuclear a gran escala. En caso de fallas no sería solamente el fin de Ethan Hunt, sino también de buena parte de la raza humana.

La cinta no da espacio para recuperarse. Las sorpresas vienen una detrás de otra, ya sea con giros en el argumento o con vibrantes secuencias de acción. “Lo que más me gusta de esta cinta es la forma en que se conjuga la acción con la comedia; creo que el público quedará encantado cuando vaya a verla. Lo más importante de mi carrera es conseguir que los espectadores disfruten con mi trabajo. Lo que realmente me gusta es entretener”, afirmó Cruise recientemente en declaraciones que retoma el diario ABC.es.

Nuevas perspectivas

Mientras que las dos primeras partes de la franquicia gozaron de una buena respuesta, la tercera dejó un cierto sabor amargo entre los fanáticos, convencidos además de que la trilogía cerraba las aventuras del agente Ethan Hunt. Sin embargo para Tom Cruise siempre hubo algo más que contar, por lo que buscó a un director que pusiera en marcha la historia y el elenco, encontrándolo en la figura de Brad Bird.

La apuesta era alta, pues Bird tiene un nombre ganado en la industria del entretenimiento, aunque en películas animadas. Es la mente detrás de cintas como Los increíbles, El gigante de hierro y Ratatouille, pero, ¿podría con una cinta de acción de alto presupuesto?

Cruise declaró para el diario español La Vanguardia.com que “fue muy simple la elección. Me encantó El gigante de hierro y me gustan todas las películas de Brad. Contar una historia es contar una historia, y cuando vi Los increíbles decidí que tenía que reunirme con él, porque me encanta cómo cuenta las tramas. Así que nos reunimos en mi casa y le pregunté si quería hacer una película que no fuera de animación. Le dije que si alguna vez quería hacerlo que me llamara, porque me impresionó mucho conversar con él. Su conocimiento y su gusto por el cine son realmente fantásticos”.

Con escenas plagadas de acción, explosiones al por mayor, balaceras con armas de todo tipo, acrobacias imposibles y un guión bastante sólido, la elección de Cruise parece haber sido la correcta. “El modo en que Brad entiende a los personajes y cómo genera momentos muy especiales es sensacional. Son momentos que a veces otros directores no entienden y terminan quedando fuera de la película, pero eso es justamente lo que hace que un filme sea especial y lo celebro. Además, con la animación, me contó cómo conseguía que los actores hicieran excelentes voces para sus personajes. Creo que su proceso de selección de actores es muy bueno, y por eso cuando ves el resultado final es impresionante”.

Tom Cruise ya anunció que habrá una quinta parte de Misión: Imposible y es que ahora que su carrera parece encarrilarse de nuevo a la cima no está dispuesto a cometer los mismos errores al alejarse de la acción. La apuesta está hecha.

POR CIERTO
De lujo

La saga de películas de Misión: Imposible ha contado con Tom Cruise como protagonista siempre, pero una de las curiosidades es que ningún director le ha “aguantado el paso” y ya son cuatro los que se han sentado en la silla de mando.

El primero fue Brian de Palma en 1996, quien fue capaz de revitalizar la franquicia televisiva y transportar su lenguaje de aventura e intriga a la pantalla grande. A él le siguieron John Woo, con un estilo mucho más cargado a la acción y J.J. Abrams, quien impuso un estilo mucho más sobrio a la cinta.

Ahora el elegido por Cruise es Brad Bird. El actor procuró no dejar ningún cabo suelto, y más ahora que él fue quien tomó en sus manos la producción de Protocolo fantasma.


''Me apasiona lo que hago, y siempre estoy con los sentidos alerta para encontrar una gran historia o un gran personaje.''
Tom Cruise, actor.