Susana Zabaleta y Regina Orozco dan “Show” en camión

CIUDAD DE MÉXICO.- “¡Acelerele chofer!”, dice una Regina Orozco sorprendida que un chofer de autobús maneje a 20 kilómetros por hora, cuando está acostumbrada, como el resto de los capitalinos, a agarrarse hasta con los dedos de los pies, abordo de un pesero (camión de transporte urbano capitalino).

Por eso pensó que sería un acto casi heróico ensayar sus corridos revolucionarios abordo de un camión, en el concepto “Las Corregidoras”.

Susana llegó después, bajó de su coche de lujo y enseguida se subió a un ruletero viejo, pero renovado. Se olvidó de sus asientos de piel para instalarse en una silla de plástico con grafiti despintados.

Las dos tomaron el micrófono y comenzaron a improvisar Bésame mucho, de Consuelito Velázquez, era el ensayo de la única presentación a dueto que tendrán Las Corregidoras el próximo 10 de septiembre y que será el preámbulo de un show y disco que preparan para finales de año que se llamará “Divas de a devis”.

Buen combo
No es la primera vez que están juntas, en más de tres ocasiones han demostrado que el público se divierte con sus acciones en el escenario; sin embargo, también han incomodado a ciertos gobernantes que presenciaron sus espectáculos pasados, como el de Divas y el inolvidable De dulce, chile y de manteca, “El dulce era yo y los demás no sé”, aclara Zabaleta de forma pícara.

Susana recordó que una ocasión, Regina, a la que le encanta hablar de política, “pues si no de qué otra cosa”, aclaró, pudo hacerle una broma a un gobernador, del que omitió el nombre a petición del mismo. “Más de un gobernador se salió antes de que terminara el show, recuerdo una vez que Regina, me preguntó antes de arrancar: ‘¿quién es el gobernador?’ y le dije que era el que estaba en la quinta fila, entonces había unas uvas que estaban de escenografía y las agarró, comenzó a cantar Summertime y mientras comía las uvas le escupía las semillas al gobernador, fue una cosa impresionante, que en el contexto que te lo cuento puede sonar grosero, pero fue tan gracioso que la gente aplaudió de pie y como vivimos en un país libre, el gobernador al final tuvo que ceder y atacarse de la risa”, recordó Zabaleta.

Las dos son soprano de tonalidades distintas, una es delgada y la otra una megabizcocho; las dos suelen derrochar energía y sentido del humor, pero el hecho de estar juntas, lo califican como una bomba de tiempo que explotará el escenario.  “Estamos planeando un disco y un show realmente divertido, será una bomba, no sé si se salgan todos de la sala o entren. No sé como será eso, no me lo imagino, es que en un escenario Regina y yo somos como niñas chiquitas, nos divertimos mucho y a veces somos terribles, pero la gente se divierte”, advirtió Zabaleta. Y sobre advertencia no hay engaño.