Rigoberto Castañeda lleva el terror al límite

GUADALAJARA, JALISCO.- Todo comenzó con los clásicos. Rigoberto Castañeda no había cumplido los siete años y su primera película de terror fue El exorcista. El director de cintas como Km31 recuerda la experiencia entre risas, pero asegura que aún ahora le sigue impresionando.

A los 18 años Castañeda pasó de ver películas y series de horror a pensar en hacerlas, y al entrar al CCC quedó más que convencido de que su vocación era hacer cine de horror, “creo que naces con el código genético así”, comenta en entrevista telefónica con EL INFORMADOR.

Fue cuestión de tiempo para que las dudas o “las variables”, como menciona Castañeda, que acompañan a un género como el terror despejaran las inquietudes de los productores y apostaran en México por cintas de dicho género, el resultado le dio la razón, escribió y dirigió Km31 y en el género se colocó como la cinta más taquillera de los últimos tiempos y esa facultad de avanzar la llevó a la pantalla chica con la producción M13DOS.

Ahora el cine hollywoodense toca a su puerta y este viernes estará de fiesta, pues a la par de que celebrará el estreno de su reciente producción Blackout, también será su cumpleaños. “(Hace casi dos décadas) tenía claro que quería hacer terror y suspenso principalmente, y todos los subgéneros que nacen de ahí también me interesan como la ciencia ficción y la fantasía”. Y el deseo que quizá pidió en un cumpleaños cuando tenía apenas siete años y veía Alfred Hitchcock presenta parece que finalmente se ha logrado.

¿Te encontraste obstáculos para desarrollar proyectos de terror?
“Recuerdo que desde que estaba en la escuela de cine y tuve mi primer contacto con productores todo mundo me decía que era algo prácticamente imposible, que los nuevos y los viejos intentos eran patéticos y que la audiencia en México no estaba lista para recibirlas y los productores no estaban listos para hacer algo de calidad. Sabía que iba a ser difícil, pero resultó más fácil de lo que pensaba. Durante 10 años estuve pensando qué hacer exactamente y cómo lo iba a realizar y creo que el convencimiento que tuve me generó la seguridad para resolver el miedo de los productores. En el terror y el thriller psicológico se involucran muchas variables, y cada una significa una posibilidad de fracasar, un riesgo a su dinero”.

¿Te consideras un campeón en el género de terror luego de los resultados de “Km31”?
“No para nada, me falta mucho por aprender. Creo que nunca se deja de aprender, cada proyecto es un aprendizaje. Blackout era un reto muy importante, tomé un guión que no es mío, una historia que no surgió de mí, y me quedo con ganas de hacer más. Me queda claro que no soy un genio y el trabajo en equipo es muy importante, y eso incluye a alguien que haya tenido una gran idea, alguien que la haya escrito y alguien que la produzca”.

¿Cómo fue trabajar el terror al estilo Hollywood?
“El guión suena muy sencillo: tres personajes, una habitación de dos metros cúbicos, pero yo me las arreglo para complicármelas (risas). El equipo de trabajo era una ‘Torre de Babel’ porque había españoles, italianos, mexicanos, estadounidenses; pero no hay punto de comparación con el trabajo en México porque nuestros equipos de trabajo son los mejores. Tenemos un gran empuje para hacer las cosas”.

¿En qué trabajas ahora?
“Estoy terminando de escribir el guión de la segunda parte de Km31, creo que ya sé por dónde va y creo que va a superar por mucho a la primera parte. Va a ser mucho más fácil financiar y levantar. Tenemos que respetar la primera parte, probablemente filme este mismo año la película”.

¿Ya tienes contemplados actores para la segunda parte de “Km31”?
“Hay muchos personajes y quiero que vayan casi los mismos actores que en la primera parte de Km31. Quiero que venga Ileana Fox, Carlos Aragón, el personaje principal en la segunda parte, el actor español Adriá Collado y Raúl Méndez, que a pesar de que su personaje muere en la primera parte viene con sorpresas en la segunda”.


((RECUADROS))

Se acerca a la fantasía
A pesar de que el terror forma parte esencial de la vida de Rigoberto Castañeda, es la fantasía lo que observa en su futuro, pues está por comenzar a trabajar en el diseño de la cinta Alegorías una película en la que el maquillaje, animación y green screen juegan un papel relevante. “Alegorías es un guión que terminé de escribir en noviembre, me siento muy orgulloso de él, ganó un premio del Tribeca Film Institute y eso me ayudará a desarrollar la película”.

Castañeda relata entusiasmado la trama del proyecto que aún está por perfilar: “Se desarrolla en el México de los años cuarenta y trata de un héroe, es un zapatero, un chico común y corriente que se encuentra con un mundo paralelo debajo de la capital del país; esa ciudad se llama Alegorías y es precisamente una alegoría de lo que somos como mexicanos”.

¿De qué se trata “Blackout”?
En un pacífico edificio de departamentos tres vecinos se quedan encerrados en el elevador después de que éste sufre una avería. El problema es que todos tienen asuntos pendientes: Claudia (Tamblyn) está desesperada por llevarle a su abuela en el hospital una foto de su abuelo para morir en paz; Tommy (Hammer) tiene que llegar a tiempo con su novia para fugarse con ella; y Karl (Gillen) tiene un asunto aún más grave por cumplir, debe urgentemente limpiar los restos de su último asesinato antes de que su hija de ocho años vaya a verlo por la mañana para pasar el día con él. Mientras los vecinos están encerrados, la tensión es cuestión de tiempo.

Frase:
“Creo que el cine es como el póker, si apuestas más ganas más, ese es el chiste, esta industria se tiene que hacer a base de cosas nuevas y arriesgar un poco más”
Rigoberto Castañeda, cineasta

Blackout / Dirigido por Rigoberto Castañeda / Con Ed Dougherty., Aidan Gillen, Amber Tamblyn, Armie Hammer y Katie Stuart / Estrena el viernes