Refrenda Caifanes su éxito con ''show'' nostálgico en el Auditorio

CIUDAD DE MÉXICO (22/JUN/2012).- Caifanes continúa haciendo historia y refrendó que sigue en el gusto del público que la noche de este jueves se le rindió en el Auditorio Nacional, donde ofreció un concierto colmado de nostalgia.

Tras su reencuentro en el Vive Latino 2011, Saúl Hernández, Sabo Romo, Alfonso André, Diego Herrera y Alejandro Marcovich se volvieron a encontrar con sus fans, quienes les siguen siendo fieles, pues abarrotaron el "Coloso de Reforma", en la capital mexicana.

Con unos minutos de retraso, lo cual hizo que se impacientaran los asistentes, quienes chiflaban para pedir que ya comenzara el concierto, apareció en el escenario Diego (tecladista y saxofonista), lo que provocó que los ánimos se elevaran.

Con los acordes de "Viento", las personas que aún continuaban en sus asientos se levantaron para captar imágenes de la banda y comenzar a cantar al ritmo del tema, a la par que se proyectaban fotografías de los inicios de la agrupación, considerada un icono del rock mexicano.

"Caifanes se pone a sus pies, sus deseos son órdenes", manifestó Saúl Hernández, para dar paso "Cuéntame tu vida", "Perdí mi ojo de venado" y "Te estoy mirando".

"Este disco se grabó hace muchos años, fue el primero de Caifanes, ha salido de muchas historias y sorpresas, fue el que nos abrió las puertas en el Auditorio Nacional hace 24 años. Fuimos el primer grupo de rock alternativo, han pasado muchos años y lo más sorprendente es que seguimos juntos", señaló el cantante.

Tras ello, se escuchó "Amanece" y "Antes de que nos olviden", con la cual Saúl recordó cuando grabaron "Caifanes. Volumen II", y en ese entonces un productor les dijo que tenían que pasar su examen final para poder lanzarles un disco.

A la par de interpretar "Voy detrás de ti", "Elefante", "De noche todos los gatos son pardos" y "Los dioses ocultos", el líder de la agrupación contó anécdotas de su trayectoria y el proceso de cómo lanzaron los álbumes.

"En este disco empezamos a entrarle a un cuestionamiento interno mucho más profundo. Esta canción se le cantó a los jóvenes que están estudiando, a todos los jóvenes que quieren cambiar este país y por favor, que exista un candidato o presidente que le tenga un pensamiento de profundidad a todos ustedes. México eres tú", expresó antes de interpretar "Metamorféame".

Conforme el tiempo trascurría, el público se entregaba más a su banda favorita, a la que le aplaudía y celebraba cada una de las palabras de Saúl Hernández, pero sobre todo coreaba cada una de las canciones, como "Quisiera ser alcohol" y "Miedo".

"Muchas gracias, que Dios los bendiga", manifestó Saúl, palabras con las cuales se vislumbraba la despedida de Caifanes, pues sus integrantes desaparecieron del escenario, pero fue tal la insistencia del público, que regresó para complacerlos con "Aviéntame", "Hasta morir", "Será por eso" y "Nubes".

Algo que captó la atención de los presentes fue cuando Saúl presentó a Alejandro Marcovich, y éste hizo un solo con su guitarra de "México, lindo y querido", canción que fue coreada por la gente, para seguir con "No dejes que", "Afuera", "La célula que explota" y cerrar con broche de oro y poner a bailar al ritmo de "La negra Tomasa".

Caifanes, desde su regreso a los escenarios en 2011, ha pisado el Foro Sol, el Palacio de los Deportes, El Plaza Condesa y ahora el Auditorio Nacional, abarrotando los foros con sus fieles seguidores.