Quieren ser libres y poder ir de una televisora a otra

CIUDAD DE MÉXICO.- Los actores de televisión en México imaginan un mundo utópico, en el que puedan pasar de una televisora a otra sin ninguna restricción, que lo único que los amarre sea un buen proyecto y no un contrato.

Esto, es realmente relevante, porque el cambio les permitiría renovarse constantemente. Mauricio Islas es un buen ejemplo, ahora integrado las filas de TV Azteca, tras seis años de pertenecer a Telemundo (Miami) y años antes como joven galán en Televisa. Islas logró que la producción de Azteca, La loba, alcanzara 16 puntos de rating en su debut. Lo intrigante del caso es que al actor capitalino también se le ve en Televisa, protagonizando la telenovela Pecados ajenos, la cual grabó con Telemundo en 2008, al lado de Lorena Rojas. Por si fuera poco, Telemundo transmite actualmente en EU, el melodrama de época, Los plateados, donde el mexicano participa.

“Nunca me imaginé estar en tres televisoras al mismo tiempo. Fíjate cómo es la vida, sin hacer nada acomoda los ejes de tal manera que estoy en ambos caminos”, comentó el actor en entrevista para KIOSKO.

De San Ángel al Ajusco y viceversa

Este fenómeno se comenzó a dar con el nacimiento de TV Azteca en 1993, que pretendía competir con Televisa.

Con la llegada de la televisora del Ajusco, algunos actores trataron de refrescar su imagen, pero sus jefes en San Ángel no se los permitieron, de hecho en esos años su elenco era sancionado si se atrevía a conceder entrevistas para la competencia.

Sin embargo, el de Mauricio Islas no es un caso aislado; ese mismo sueño también lo hizo realidad Cecilia Suárez, quien empezó en la telenovela La casa del naranjo (1997), después grabó Mi pequeña traviesa (1998) con Televisa, pero dos años después la casa productora independiente Argos la invitó para el proyecto Todo por amor, que se transmitió por Azteca 13.

Se la pasó siete años sin hacer televisión y cuando regresó lo hizo en series: Capadocia (HBO) y Mujeres asesinas, ésta última cooproducción de Pedro Torres con Televisa.

El año pasado también participó en la serie, Locas de amor, de la productora Carmen Armendáriz, quien por cierto también ha brincado de televisora.

Caso similar es el de Ana Claudia Talancón (Arráncame la vida), quien luego de varios proyectos en la empresa de Ricardo Salinas Pliego, aceptó protagonizar la serie Terminales para la televisora de San Ángel.

A la lista se suman Rocío Banquells, Roberto Blandón, Marco Muñoz, Yuri, Javier Días Dueñas, Gloria Trevi, Sergio Mayer, Alejandro Camacho, Rebecca Jones y recientemente Rogelio Guerra, quienes se fueron por un tiempo a Azteca, pero ta están de nueva cuenta en las filas de Televisa.

Ninel Conde también es un caso especial, comenzó su carrera en Televisa, la formó el experimentado productor Antulio Jiménez Pons, quien después se la llevó a la competencia para participar en Perla, estelarizada por Silvia Navarro y Como en el cine, aunque luego decidió regresar a su primera empresa.

Ana Serradilla, es una actriz cotizada, ella hace cine y televisión, inició su carrera en 1998; después de ocho proyectos en la televisora del Ajusco logró protagonizar la serie de Once TV, Línea nocturna, un buen intento de las leyendas urbanas de terror.

Plutarco Haza dejó Televisa en 1997 para participar en Mirada de mujer, y aunque al parecer aun forma parte de Azteca, también tiene la oportunidad de trabajar para Argos, de Epigmenio Ibarra, que produce Las Aparicio, teleserie que se transmitirá por Canal 28.

“El trabajador busca trabajo en donde le den oportunidades y gane bien, no puedes estar con un contrato siempre ligado a una empresa nada más porque estás respirando aire. No tengo exclusividad, es muy complicado que alguien piense que le perteneces a pesar de que llevas mucho tiempo ahí.

“A mi me encantaría hacer un proyecto, terminar y trabajar en donde quiera. Esa es la idea y que las cosas cambien en las otras dos empresas importantes, que haya una apertura, creo que hasta les va a convenir, se ahorrarán mucho dinero, simplemente creando mejores propuestas a los actores para que se queden y no amedrentando con contratos o amenazas, porque sólo se quedarán con la gente miedosa y mediocre”, cuenta el actor.

Barbara Mori, quien se llevó el rating en 2004 por el proyecto Rubí, comenzó en Azteca tras la invitación de Argos para realizar el fenómeno televisivo Mirada de mujer en 1997; para esa televisora realizó siete telenovelas, pero cuando recibió la invitación de Salvador Mejía no lo dudo.

En tanto los actores de Telemundo como Ivonne Montero, Mariana Torres, Saúl Lisazo, están regresando a TV azteca, Lisazo lo hizo en 2007 para Mientras haya vida.

Se quedan con las ganas

Sergio Basáñez, un galán consentido de TV Azteca, que cautivó al público femenino con la pareja que consolidó al lado de Silvia Navarro, en cuando su carrera comenzó a despuntar recibió varias propuestas para actuar en proyectos de Televisa, sin embargo, la televisora del Ajusco se enteró y sacó un contrato en el que se argumentó que el actor tenía proyectos pendientes con esa televisora y tuvo que descartar el salto.

Jaime Camil, desde hace algunos años exclusivo de Televisa, también guiso diversificar sus opciones, Epigmenio Ibarra lo invitó para hacer un personaje especial en la serie Capadocia que Argos produjo para HBO, filmó las escenas del último capítulo de la primera temporada en el Toreo de Cuatro Caminos el 20 de mayo 2007, la secuencia fue una visita conyugal al personaje de Ana de la Reguera y que tendría continuidad para la segunda temporada.

Sin embargo, cuando Televisa se enteró jaló las orejas del actor y tuvo que ponerse en contacto con Epigmenio para eliminar esas escenas, el actor no fue sustituido.

Las televisoras son celosas, Televisa, por ejemplo castiga con vetos a quienes trabajan en otras televisoras, los primeros castigos fueron cuando sus actores exclusivos daban entrevistas a los micrófonos Azteca.