Proyectan ''Margaret Day'' a ritmo de Silberer

GUADALAJARA, JALISCO (04/MAR/2013).- Es la hora del atardecer y alrededor de cincuenta jóvenes en edad estudiantil hacen  fila a las afueras del Paraninfo de la UdeG, una de las sedes  del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) , a la espera de la proyección de ''Margaret Day Ingeborg Holm'' de Victor Sjöström.

‘’¿Ya habías venido?’’, le pregunta un chico a su acompañante. ‘’No, pero pues es domingo y tuve tiempo, aunque quería ir también a la inauguración’’,  le responde una muchacha de  tez morena y larga  cabellera.

En cambio, otros se dan cita al Son de Cine sin otorgarle el crédito a la casualidad. ‘’Ojalá esté buena’’  dice Alejandro, un estudiante de 20 años de cine.

La proyección es muy especial debido a que ''Margaret Day'', que fue filmada en 1903, cumple 100 años, cuenta un Trujillo a la expectativa.

Antes  de ver la pelícua, que también se conoce como  ''Ingeborg Holm'', explica que expondrán el cortometraje ''Ellsworths flyveekspedition'' de Roald Amundsen. Se apagan las luces y Deborah  Silberer sube a la tarima.

El corto trata sobre una expedición al Polo Norte y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La música de Silberer suena al mismo compás de que pingüinos se deslizan sobre el hielo, y acompaña con desenvoltura y gracia las imágenes en las que pescadores van en barco y explorar las aguas heladas. El público aplaude con fuerza al finalizar.

Se prenden las luces y Jan Erik Billinger pasa al centro para presentar ''Margaret Day''. Con ayuda de una traductora, el director del Departamento de Patrimonio Fílmico del Instituto Sueco de Cine, explica que la cinta se filmó durante la era de Oro de las películas mudas y que en su país intentaron detener que se exhibiera y estrenara la película, cosa que fracasó,  y en contraparte se volvió una herramienta para decir que  los pobres tienen derecho a una mejor vida.

El filme,que se divide en actos, lanza una crítica a la seguridad social de Suecia, pues aborda la historia de una familia normal que, a partir de la muerte del padre, sufre diversas situaciones difíciles para la madre y para los hijos, debido a problemas económicos. Tras más de 90 minutos el público se va satisfecho con la emotiva cinta y la música de Deborah Silberer.