Promueve la ECRO la conservación preventiva

GUADALAJARA, JALISCO.- “En los últimos años, el tema de la conservación preventiva ha tomado una mayor relevancia, porque si la implementas en los museos, las escuelas, las casas, en colecciones privadas, estás teniendo cuidado de ellas, previenes muchas restauraciones costosas”, explica la historiadora del arte Marjolijn Debulpaep, del Instituto Real de Patrimonio Artístico (IRPA) de Bélgica, quien ha llegado a la ciudad de Guadalajara para impartir un curso en torno a este tema en la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO).

Y si bien hay una serie de lineamientos que tienen que ver con la mejor forma para conservar el patrimonio, lo cierto es que los procedimientos no se pueden aplicar de manera idéntica, debido a las condiciones propias de cada país.

“Las soluciones no pueden ser las mismas, porque hay diferencias en el contexto, diferente clima, diferentes insectos, problemáticas. Las bases son las mismas, debes estudiar las posibilidades del edificio, pero hay mucho por aprender. Hay que ver caso por caso y aplicar esos principios básicos para solucionarlo, pero siempre tomando en cuenta estas particularidades. En Europa hay investigaciones de nuevas formas de resolver problemas y pienso que es posible aplicar ese conocimiento, porque éste es común”, explica la conservadora-restauradora.

Por ello es que el curso, que se realiza desde ayer y concluirá el próximo viernes, es ante todo una actualización de las técnicas de conservación preventiva, pero también dará tiempo a Debulpaep de adentrarse en las características específicas de los materiales, con base en los talleres que existen en la ECRO e incluso quizá haya tiempo de hacer visitas de campo a algunos de los espacios museográficos de la ciudad.

“Es un repaso general de conservación preventiva y además iré más en detalle con respecto a los materiales y sus características, papel, cerámica, pinturas, esculturas y me enfocaré en dichos materiales”, comenta.

Precisiones

Entonces, la conservación preventiva es una intervención continua e integral que afecta a todos los bienes culturales en conjunto. Su campo de actuación implica tanto las condiciones ambientales (temperatura, humedad relativa y contaminación), intensidad y calidad lumínica, control orgánico de plagas, como las de exposición, almacenaje, mantenimiento (limpieza, revisiones periódicas) o manipulación de las piezas.

“La conservación preventiva no solo es de una pieza, lo es en todo el entorno, proteges más que un solo objeto y si lo haces de la mejor forma y mantienes un ojo en la situación todo el tiempo, no será necesaria una restauración. Por ejemplo, en una sala con materiales distintos, puedes encontrar una solución para todos. La mayoría de las veces te concentras en el material más sensible de la sala”, explica Marjolijn Debulpaep.

Añade que es posible que se trate de una acción mucho más económica de lo que podría resultar una restauración, aunque también ha traído al curso algunos tipos para hacerlo todavía más económico y con buenos resultados.

Al final de cuentas, uno de los mayores cambios que supone la conservación preventiva es una modificación en la mentalidad de aquellos que se encargan de la protección del patrimonio, dando solución al problema antes de que éste se presente.